Papaya, mamón, lechosa, melón de árbol o cómo sea que la llames, esta fruta tropical originaria de Centroamérica así cómo la ves con sus cráteres y pintas en la piel proporciona innumerables beneficios al cuerpo, además de ser deliciosa especialmente cuando está madura y lista para comer. La puedes disfrutar picada en trozos con otras frutas para un desayuno saludable, en un batido o en forma de postre cuando quieres consentirte con algo dulce. Sus nutrientes vitales incluyen vitaminas A, B, C, y minerales como el calcio, hierro, fósforo y potasio cuyas propiedades ayudan al sistema nervioso, la presión arterial, la ansiedad y el estrés.
Una de sus propiedades mas populares es una enzima llamada papaína, la cual actúa para promover la fácil digestión de proteínas y crear péptidos y aminoácidos que ayudan a reducir el dolor, la inflamación y la hinchazón. También puede mejorar la digestión y tratar infecciones y alergias. Indiscutiblemente, los beneficios de la lechosa son múltiples, pero su versatilidad en la cocina es igual de impresionante. A continuación encontrarás dos recetas que así lo demuestra:
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Batido de Lechosa
Un batido de papaya puede ser perfecto como merienda, desayuno o después de una rutina de ejercicios ya que la papaína ayuda con la recuperación y dolor muscular.
Ingredientes
Preparación
Mezcla todos los ingredientes en una licuadora de alta velocidad y licua por 1-2 minutos. Sirve y disfruta.
Dulce de Lechosa
Este dulce puede ser perfecto para disfrutar después de la cena, una tabla de charcutería, o sencillamente con galletas o sobre pan tostado.
Ingredientes
Preparación
1. Pela y corta la lechosa en tiras finas, aproximadamente de ¼ pulgadas.
2. En una olla sobre fuego alto agrega 1½ litros de agua y deja hervir. Agrega el bicarbonato y la lechosa. Permite cocinar durante 5-7 minutos. Deja reposar, cuela, y baña con agua fría.
3. En una olla separada sobre fuego alto añade el resto del agua, azúcar, los clavos, la canela, el papelón, permite cocinar por 12-15 minutos hasta punto de almíbar.
4. Agrega el almíbar a la lechosa y cocina por una hora. Retira y
permite enfriar. Envásalos en recipientes de cristal.
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