Han pasado ya varios días desde que las autoridades mexicanas arrestaron a Mario Alberto Reyes Nájera y Gladis Giovanna Cruz Hernández, acusados de haber secuestrado, abusado sexualmente y asesinar a la pequeña Fátima Cecilia, de 7 años, quien desapareció el 11 de febrero tras salir de su escuela en la capital azteca y la persona que dio aviso a la policía habló con Univisión, donde reveló nuevos detalles de la pareja detenida.
Identificada como Irma Castañeda, la tía del presunto asesino de la niña, aseguró que tras ver en televisión que la mujer a la que estaban buscando era la mujer de su sobrino, quien había llegado hacía un par de días a pedir ayuda a su casa con su esposo y sus hijos, decidió car parte a la policía.
“El mismo miércoles, como a las 6:30 de la tarde vi a mi sobrino y a la chica, y luego luego los reconocí (que eran los de la tele) y los encaré y les dije que ya sabía que habían cometido esa infamia. Y les pregunté si habían matado a la niña y la chica me dijo que sí con la cabeza”, narró la tía de Mario a Univisión.
“Pregunté quién la mató y fue cuando Mario, mi sobrino, me dijo que ella, y ella voltió y le dijo: ‘pero tú la sujetaste’. Y le dije (a ella) ¿tú la mataste?, y ella dijo: ‘sí’. Y le dije: ¿cómo la mataste?, y me dijo: ‘con un cinturón que él me dio, con un blanco, pero como no tenía la fuerza, ella (la pequeñá Fátima) todavía se movía, y él la terminó de matar'”, agregó Irma sobre la conversación que sostuvo con la pareja antes de que llegara la policía a su casa en un lugar muy pobre del Estado de México.
La mujer tambien describió lo que vio en los rostros de los presuntos asesinos: “A él lo veía con cara de cobardía y odio, y a ella llorando, no la veía arrepentida, sino con miedo”, dijo.
“Yo le dije: ‘tú te vas a entregar Giovanna, yo te voy a llevar, tienes hijas, te tengo que entregar’. Y ella se me hinca y me dijo que él fue el que la obligó, y le dije que así fuera mi hijo, tienen que pagar su delito”, agregó la mexicana, mencionando que la pareja al verse descubierta había acordado que Gladis se entregaría a las autoridades y que el hombre huiría con sus hijos por el monte.
Doña Irma también dijo que no podía saber qué clase de persona era su sobrino, pues no lo veía desde que era un niño.
“Yo dejé de ver a mi sobrino cuando tenía 4 años, hace 22 años, cuando mi hermano, el papá de él, se suicidó. Pero puedo asegurar que él fue el que la mató”, dijo. ” Esa mirada de cobardía, como cuando uno se ve descubierto, sé que fue él y también con ella, ella no tiene justificación, pudo denunciarlo antes”.
Y al ser interrogada sobre si está dispuesta a cobrar la recompensa que estaba ofreciendo la policía, la mujer dijo: “Yo ni siquiera pensé en el dinero, yo no quiero lucrar con esto, mi ignorancia es muy amplia, y yo solo pido que caiga todo el rigor de la ley sobre esta gente infame, incluso sobre mi sobrino”.
Doña Irma solo pidió protección de las autoridades, pues dijo que ahora teme por su vida. “Tengo miedo de las represalias, me he enterado que anda con gente mala. No me arrepiento (de haberlos denunciado), pero se lo dejo a las manos de Dios si me pasa algo”, confesó la mujer.
La pequeña Fátima fue encontrada sin vida el pasado 15 de febrero en una zona de terrasería en el Estado de México, atada de manos y pies, con señales de haber sido torturada y violada, en un hecho que ha generado el repudio de la población y duras críticas a las autoridades por haberse tardado varios días antes de empezar la búsqueda de la indefensa niña.