En el 2013 Univisión realizó la séptima temporada del reality show Nuestra Belleza Latina, consolidando el programa como uno de los más exitosos del canal, y esta edición en particular, fue considerada por muchos televidentes como un cuento de hadas.
El certamen, que se llevó a cabo entre el 10 de marzo y el 19 de mayo del 2013, contó con la participación de candidatas elegidas en audiciones en ciudades como Nueva York, Chicago, Houston, Phoenix, San José, California, Los Ángeles, Miami y Puerto Rico.
Tras varias veladas en las que las concursantes fueron ganándose el cariño del público, y en una de las galas que más atención ha tenido del reality show de Univisión, la salvadoreña Marisela Demontecristo fue elegida como la ganadora, mientras que la dominicana Audris Rijo, ocupó el segundo lugar.
Fue tal la participación activa del público, que en la séptima temporada de Nuestra Belleza Latina, para la gala final se recibieron más de 20 millones de votos.
Vestida con un majestuoso traje de gala en color fucsia, Marisela Demontecristo fue coronada como la Nuestra Belleza Latina, con un abrumador apoyo de los televidentes.
“La candidata en segundo lugar suma más de 7 millones de votos. La primera obtuvo, un poco más de 10 millones de votos, que representa un total de más del 31 por ciento de votos recibidos”, dijo el presidente de la mesa de jueces del certamen, Osmel Sousa, tras anunciar el fallo emitido por el público.
Tras las audiciones generales, alrededor de 75 jovencitas fueron elegidas en la pre-selección, que luego se redujo a 18 semifinalistas y finalmente a 10 que se disputaron la corona y el contrato con Univisión, al igual que los $250,000 en premios.
En tercer lugar fue elegida Viviana Ortiz, de Puerto Rico, mientras que los puestos cuarto, quinto y sexto, fueron para la colombiana Bárbara Turbay, la mexicana Marina Ruíz y la cubana Odaray Prats Molina.
El resto de semifinalistas fueron Bárbara Falcón, Zuleyka Silver, Essined Aponte, Karina Hermosillo, Fernanda Loconsolo y Lilia Fifield.
El triunfo de Marisela Demontecristo fue catalogado como el triunfo de una “princesa”, debido a la historia humilde de la jovencita, quien proviene de una familia de muy bajos recursos en El Salvador, y quien fue sacada adelante con mucho empuje, gracias a los esfuerzos y sacrificios de su madre.
Tras su triunfo en Nuestra Belleza Latina, Marisela Demontecristo se convirtió en una reconocida modelo y fue elegida como Miss El salvador, representando a su país en Miss Universo, en el 2018.
Actualmente Marisela es toda una reconocida influencer a través de sus redes sociales, donde cuenta con más de medio millón de seguidores en cuentas como Instagram.