“No hay misericordia sin corrección”: el Papa francisco reforma sanciones penales en la iglesia católica.
Durante la semana, el Papa Francisco desde la ciudad del Vaticano anunció cambios realizados al Código de Derecho Canónico, las cuales toman medidas drásticas en contra de los clérigos que abusan de niños y adultos en estado de vulnerabilidad.
De acuerdo a información de Vatican News, el máximo jerarca de la iglesia católica explicó que estos ajustes se hacen para responder adecuadamente a las exigencias de la iglesia en todo el mundo – dijo el Papa Francisco – la cual para el sumo pontífice, resultaba evidente la necesidad de revisar también la disciplina penal promulgada por San Juan Pablo II, el 25 de enero de 1983, con el Código de Derecho Canónico.
“Era necesario modificarla de modo que permitiera su empleo a los pastores como ágil instrumento saludable y correctivo, y que pudiese ser usado a tiempo y con caridad pastoral, a fin de prevenir males mayores y de sanar las heridas causadas por la debilidad humana”, aseguró el Papa.
Además, enfatizó en que el sumo Prelado que en el año 2017 el papa Benedicto XVI ya había puesto en manos de expertos en Derecho Canónico de todo el mundo, a las Conferencias Episcopales, a los Superiores Mayores de los institutos religiosos y a los Dicasterios de la Curia Romana, la revisión de la Constitución Apostólica, adelantando la revisión de una sección de acerca de 90 artículos en referencia con el crimen y el castigo, un trabajo que le fue transmitido en febrero del año 2020.
Ahora bien, frente a los escándalos que han envuelto a la Iglesia católica durante años, en el que se le denuncia por crímenes sexuales y encubrimiento de la jerarquía eclesiástica, la nueva Pascite gregem dei (Apacentad la grey de Dios), introduce nuevas categorías de crimen y castigo, al igual que acude a un lenguaje más claro y específico con miras a dar a los obispos menos margen de maniobra frente a los hechos.
“La negligencia de un pastor al recurrir al sistema penal pone de manifiesto que no está cumpliendo su función de forma correcta y fiel”, según el citado medio.
Según el diario El Heraldo, el nuevo texto ofrece “criterios objetivos en la identificación de la pena más adecuada a aplicar en el caso concreto”, reduciendo la discrecionalidad de la autoridad, para favorecer la unidad eclesial en la aplicación de las penas, “especialmente para los delitos que causan mayor daño y escándalo en la comunidad”, añadió el pontífice.
Así mismo explicó el diario mencionado que los delitos están mejor especificados, se distinguen aquellos que antes estaban agrupados, las sanciones se enumeran de forma exhaustiva y se detallan parámetros de referencia en todas partes para orientar las evaluaciones de quienes tienen que juzgar las circunstancias concretas.
Monseñor Filippo Iannone, jefe del departamento del Vaticano que supervisó el proyecto, sostuvo que había existido “un clima de excesiva laxitud en la interpretación del derecho penal”, en el que a veces la misericordia era preponderante frente a la justicia.
En cuanto al abuso sexual de menores, El Heraldo informó que la nueva ley se incluyó en una nueva sección titulada “Delitos contra la vida humana, la dignidad y la libertad”, en lugar de los anteriormente imprecisos “Delitos contra obligaciones especiales”.
Los cambios más significativos del compendio están contenidos en dos artículos, 1395 y 1398, en los que se corrigen las deficiencias que ha tenido la iglesia católica frente a los delitos sexuales. El texto va más allá y considera el “acoso” de menores o adultos vulnerables por abuso sexual y posesión de pornografía infantil.
También, la sección contempla de la posible destitución de los clérigos que se valen de “amenazas o abuso de su autoridad” para obligar a alguien a tener relaciones sexuales.
Por primera vez, la ley de la iglesia reconoce además oficialmente como criminal el “grooming” o engaño utilizado por los depredadores sexuales para establecer relaciones con sus víctimas (vía chat de Internet, por ejemplo) para luego explotarlas sexualmente, informó DW.
Es de señalar que, en el año pasado, un informe interno encontró que el excardenal Theodore McCarrick había abusado de su autoridad para obligar a los seminaristas a acostarse con él. Fue expulsado en 2019 por cargos de abuso sexual de menores y adultos, según CNN.
Además, el nuevo código, establece en este aparte que las personas laicas que ocupen puestos de responsabilidad dentro de la iglesia y sean declaradas culpables de abuso sexual de menores o adultos vulnerables, también están sujetas al castigo por parte de la misma como por las autoridades civiles.
En referencia a la ordenanza sacerdotal de las mujeres, el código revisado dice que solo agregó en otra sección, que esta estaba reservada para “un varón bautizado”.
El código revisado advierte específicamente que tanto la persona que intenta conferir la ordenación a una mujer como la mujer misma incurren en la excomunión automática y que el clérigo corre el riesgo de ser expulsado.
Kate McElwee, directora ejecutiva de la Conferencia de Ordenación de Mujeres, dijo en un comunicado que, si bien la posición no era sorprendente, detallarlo en el nuevo código era “un doloroso recordatorio de la maquinaria patriarcal del Vaticano y sus intentos de gran alcance de subordinar a las mujeres”, aseguró CNN.
Otros temas considerados en esta reforma tienen que ver con casos del Codex de 1917 que no fueron atendidos en 1983, y que tienen que ver con la corrupción en actos oficiales, la administración de sacramentos a sujetos a los que no se les pueden administrar, el encubrimiento a la autoridad legítima de cualquier irregularidad o censura en la recepción de las órdenes sagradas.
Así mismo se anexan casos nuevos, como la violación del secreto pontificio, la omisión de la obligación de ejecutar una sentencia o decreto penal o la omisión de la obligación de notificar la comisión de un delito.
Según el Vaticano esta modificación a la Constitución Católica busca proteger a la comunidad y prestar mayor atención a la reparación del escándalo y la indemnización por daños, pero también disponer de los medios necesarios para prevenir delitos, y poder intervenir a tiempo para corregir situaciones que pudieran agravarse.
Finalmente, el papa Francisco ha establecido que el Código de Derecho Canónico reformado entrará en vigor a partir del próximo 8 de diciembre del presente año.
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