Getty Images
El artista urbano puertorriqueño Bad Bunny se metió en la piel de uno de los llamados “Narcos Junior de Tijuana”, en la tercera temporada de la serie de Netflix “Narcos México”. El Conejo malo es Arturo “Kitty” Páez y una vez más demuestra porqué es considerado uno de las estrellas latinas más versátiles de hoy en día.
Benito Antonio Martínez Ocasio tiene ante sí la responsabilidad de interpretar a un hombre sanguinario que llegó alto en las filas de la familia criminal Arellano Félix, los líderes del peligroso Cartel de Tijuana, que controlaba el narcotráfico en el suroeste de Estados Unidos.
Por la puerta grande
La interpretación del Kitty es el primer trabajo de Bad Bunny como actor, si no se toman en cuenta algunos de sus videos musicales como el de “Yo perreo sola”, en el que se transformó en mujer.
Para alguien sin experiencia en las artes histriónicas, este debut equivale a entrar por la puerta más grande. Hay muchos actores con años en su currículum que sueñan con la oportunidad de tener un papel en una serie de Netflix, más aun cuando se trata de una producción tan exitosa y con tanta tracción a nivel internacional.
Narcos tuvo tres temporadas contando la vida del capo del Cartel de Medellín Pablo Escobar, su caída y la subsecuente alza del Cartel de Cali. Luego, Netflix sacó Narcos México, que aunque es cronológicamente lo que le sigue a Narcos, se ha presentado como otra serie.
Quién es Arturo “Kitty Páez”
Aunque Netflix no ha dicho qué tan extensa será la presencia de Bad Bunny en la serie, se sabe que su personaje hizo historia en México, como parte de los Narco Juniors, como se le llamaba a un grupo de jóvenes de dinero que se sumaron al Cartel de Tijuana, casi que por diversión.
El Kitty era parte de una familia poderosa y, según informes de la DEA, fue quien estuvo a cargo de reclutar a amigos y allegados para la organización. También fue el primero en llegar a Estados Unidos. Arturo Páez encabezó la fila de narcotraficantes extraditados por México a Estados Unidos.
Bad Bunny ha tenido un año histórico
El Conejo Malo aprovechó 2020 para convertirse en el principal referente de la nueva generación de artistas latinos, que se niegan a ser definidos o encasillados. Benito Martínez comenzó el año en el escenario del Super Bowl, donde cantó con Jennifer López, Shakira y J Balvin. Sacó dos discos, apareció en la portada de la versión estadounidense de la revista Rolling Stones y obtuvo múltiples nominaciones y premios en los Latin Billboards y Latin Grammy.
El artista además se afincó como un poderoso activista en su natal Puerto Rico, donde encabezó las protestas contra el ahora ex gobernador Roselló, alzó su voz contra los feminicidios y los asesinatos de personas de la comunidad LGBTQ
Como si eso fuera poco, este noviembre se coronó como el artista con la canción más tocada del mundo. Se trata de “Dákiti”, con Jhay Cortés.