Foto por Miguelangel Duque/@madfashionartist Ivi Joy
El miedo es una emoción de supervivencia. En todas las culturas existe esta emoción primaria. Es una emoción más como cualquier otra. En muchas ocasiones nos paraliza y es ahí cuando encontramos dificultad y no sabemos qué hacer. Este puede ser visto como un modo de alerta. Nos puede incluso traer grandes beneficios evitando que nos expongamos a situaciones peligrosas o que no estamos listos para experimentar.
El miedo nos alerta
Como decimos los mexicanos: ‘nos gusta ponerle mucha crema a nuestros tacos’. Es decir nos gusta exagerar las cosas. Una vez que el miedo se presenta es para ponernos en alerta eso es todo. Para así poder tomar acción y poder ver que es lo mejor para nosotros en ese momento. Cuando le ponemos mucha crema a nuestros tacos es cuando ya esa emoción se vuelve negativa. Empezamos con nuestra mente hacernos historias que son ficción o exageradas de la realidad. Cuando nos envolvemos completamente en la actividad mental podemos incluso entrar en un estado de pánico, de tremenda angustia y ansiedad. En este punto muchos pueden decir que ya no saben qué hacer y que el miedo es más grande que ellos. Es como si fuera un gran monstruo que ataca y nos sentimos amenazados por él. Por eso les quiero compartir esta hermosa historia de Pema Chödrön.
La historia de Pema Chödrön
“Había una vez una joven guerrera. Su maestra le dijo que tenía que luchar contra el miedo. Ella no quería hacer eso. Parecía demasiado agresivo; fue aterrador; Parecía poco amable. Pero la maestra dijo que tenía que hacerlo y dio instrucciones para la batalla.
Llegó el día. La estudiante guerrera estaba a un lado, y el miedo estaba en el otro. La guerrera se sentía muy pequeña, y el miedo parecía grande y furioso. La joven guerrera se despertó y fue hacia el miedo, postrada tres veces, y preguntó: – ¿Puedo tener permiso para ir a la batalla contigo? El miedo dijo: Gracias por mostrarme tanto respeto que usted pide permiso.
Entonces la joven guerrera dijo: ¿Cómo puedo derrotarte?
El miedo respondió: Mis armas son que hablo rápido y me pongo muy cerca de tu cara. Entonces te enfadas completamente y haces lo que digo. Si no haces lo que te digo, no tengo poder. Puedes escucharme, y puedes tener respeto por mí. Incluso puede ser convencido por mí. Pero si no haces lo que digo, no tengo poder “.
De esa manera, la estudiante guerrera aprendió a derrotar el miedo.
Agradece la presencia del miedo
Si te das cuenta es bien simple, pues la vida es así simple pero a nosotros nos encanta complicarla. La próxima vez que sientas miedo agradece su presencia ya que te está alertando de algo, después reconoce si le estás agregando crema a tus tacos, y de ser así no le hagas caso a lo que tu mente te está queriendo hacer ver y sentir. Si no actúas sobre ello recuerda que pierde su
poder. Te abrazo con mi corazón ❣
¿Quién es Ivi Joy?
Hola! soy Ivi Joy. Yo nací en Japón, tengo la nacionalidad mexicana, recientemente me convertí en ciudadana estadounidense. Tengo 15 años de experiencia en la industria de la comunicación y el entretenimiento. Yo tengo 12 años como practicante de reiki, y 3 años compartiendo el camino de sanación e iluminación de Nada yoga. También soy profesora de yoga certificada. Yo creo que todos tenemos el poder y todos los recursos para sanarnos a nosotros mismos. Ser espiritual es un estilo de vida en el que estamos despiertos y conscientes de quiénes somos y para qué estamos aquí, y nuestra experiencia personal es nuestro mejor maestro.
Bendiciones de colores!
Ivi está disponible para sesiones privadas y retiros en todo el mundo y se puede contactar al 561-685-2140
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