Mezcalent
El juicio por acoso sexual contra Pedro Rivera llegó a su fin el sábado 18 de junio, tras casi dos semanas muy desagradables en las que el papá de Jenni Rivera y Lupillo Rivera y el abuelo de Chiquis fue confrontado por su acusadora y ex empleada Fabiola Ávalos.
La mujer, quien se deshizo en lágrimas frente al juez, aseguró que el patriarca de la familia Rivera y abuelo de Chiquis se había le insinuado constantemente y que la había “castigado” cuando no respondió a sus avances sexuales como él esperaba.
Según la mujer, estos avances incluyeron tocarla en la entrepierna, roces y comentarios de doble sentido. Además afirmó que le habían reducido la hora del almuerzo y hasta la había agarrado con fuerza para evitar que interactuara con periodistas.Lamentablemente para ella, el veredicto en todo lo referente al acoso sexual de Pedro Rivera benefició en casi en todo al acusado.
Sin embargo, lo encontraron culpable en uno de los cargos y esto podría salirle muy, pero muy caro.
Entre los 11 cargos contra Rivera que los abogados de Ávalos intentaron probar estaban acoso sexual, acoso laboral, abuso laboral, abuso emocional, salarios no pagados. La mujer aseguró que el ambiente “era insoportable; ya era difícil porque, como le dijo, era una cosa tras otra y sentía que todo era contra mí”, expresó durante su testimonio que duró más de cinco horas.
MezcalentPedro Rivera celebró el Día del Padre muy aliviado
Sin embargo, el veredicto en el caso de Pedro Rivera fue de inocencia en todos los cargos, menos en el de salarios no pagados. El papá de Jenni declaró a la salida de los tribunales, acompañado de sus hijos menores Juan Rivera y Rosie Rivera, quienes estuvieron al lado del abuelo de 79 años en todo momento.
“Gracias por venir a este evento tan vergonzoso”, expresó Don Pedro con una sonrisa aunque con un aspecto de estar muy cansado. Aun en ese contexto, el papá de los Rivera demostró que no pierde una oportunidad ante las cámaras para promover su negocio e invitó al público a celebrar el Día del Padre apoyando una canción que estaba por lanzar.
“De tanto andar por la vida, hijo de mi corazón, me están pesando los años, el cuerpo se me cansó. Tal vez se acerca el momento que habré de decirte adiós”, dice la letra del pedacito que cantó del nuevo tema.
Por su parte, Lupillo Rivera, uno de los hijos más dedicados a Don Pedro, escribió en sus redes: “Mi PADRE….felicidades por este logro más en su vida…NUNCA LO DUDE!….toda la vida ud a sido un gran caballero con todas las mujeres y empleadas de su empresa….desde que empecé a trabajar con ud 1987….nunca miré más que amabilidad pura con toda la gente”.
La empresa de Pedro Rivera se llama Cintas Acuario y tiene como propósito editar discos y promover carreras artísticas de artistas en el género de música regional mexicano. Él es uno de sus propios talentos, así como lo fueron en sus inicios sus dos hijos Lupillo y Jenni Rivera. El veredicto de culpable en su caso tiene que ver con la falla de tener los documentos regidos por la ley en lo que se refiere al pago de salarios, pues no tiene los comprobantes requeridos, conocidos como “pay stubs”, por lo que no pudo comprobar legalmente que sí pagó todo lo que le correspondía a Fabiola Ávalos, quien fue su empleada por 19 años. Como consecuencia, la mujer tiene derecho a demandar una indemnización por una cantidad que podría llegar al medio millón de dólares.