Getty Images Mira como lucía Dayanara Torres cuando era niña
Dayanara Torres no ha sido una mujer muy afortunada en el amor, y aunque se siente feliz con el cariño de sus hijos, su familia y sus fieles amigos, al igual que agradecida con la vida tras haber ganado la batalla contra el cáncer, la exreina de belleza no se niega la posibilidad de volver a amar.
Así se lo confesó la preciosa boricua a la revista People en español, donde mencionó cuáles son aquellas características importantes que debe tener su próximo novio.
“Que me haga reír, no puedo con la gente seria. Me encanta reír, así somos en mi casa. Que sea comprensivo, que entienda que mis hijos son mi prioridad, que me deje brillar”, mencionó la exreina de belleza, al tiempo que destacó que es muy importante que sea un hombre que respete su libertad y sus deseos de llegar lejos. No le dio importancia al aspecto físico.
“Que no me corte las alas, que sea una persona honesta y capaz de lidiar con cosas. Lo voy a apuntar en un papelito y lo voy a tirar al aire a ver que pasa”, agregó Dayanara.
La ex Miss Universo también destacó que ser madre es lo que más ha valorado en la vida y dijo que haber levantado a sus dos hijos, de 19 y 16 años, sola, la llena de orgullo.
“El tenerlos tan joven, el haber estado sola con ellos, nos creamos un equipo, me ayudaban bastante. Son niños buenos, de buen corazón. Siempre están pendientes uno del otro. Se quieren mucho, se respetan”, comentó la puertorriqueña.
Dayanara mencionó recientemente además que aunque le dolió mucho su ruptura con su prometido el año pasado, cuando soñaba con casarse con Louis D’Esposito, un ejecutivo de Marve Studios, aprendió a ser más fuerte.
La exreina de belleza recibió dos golpes que la dejaron en el piso. Primero los doctores le informaron que tenía cáncer de piel y días después, su prometido, terminó su relación asegurándole que la nueva situación de la boricua era “demasiado” para él.
Sobre el momento de la ruptura dijo: “Por fin dejo a una persona a entrar a mi hogar, a que lo conozcan mis hijos. Todo iba viento en popa. Él vino para que yo le hiciera caso, para que yo me chequeara y tomara control de lo que estaba pasando. Ese fue su papel, simplemente vino a eso”.
Dayanara agregó que no le gusta ver las cosas de manera negativa y que esa ruptura no fue la excepción.
“Todo lo que pasa le busco el por qué. Me puedo derrumbar y decir: ‘¿Por qué ahora que me está pasando esto esta persona me deja?’ No, él tuvo un propósito. Su propósito fue entrar, quererme, dejarme saber lo del melanoma y salir. Y está bien, va a haber otra persona. Hay que entender porqué pasaron las cosas y salir adelante”.
