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El alcalde de Nueva York, Eric Adams, declaró este viernes el estado de emergencia para ayudar a responder a la crisis migratoria de la ciudad, lo cual le costará a la ciudad 1 mil millones de dólares este año fiscal, según informó el funcinario en una conferencia de prensa.
“Ahora tenemos una situación en la que llegan más personas a la ciudad de Nueva York de las que podemos acomodar de inmediato, incluidas familias con bebés y niños pequeños”, aseguró Adams durante su discurso. Y en la misma línea, advirtió: “Una vez que los solicitantes de asilo de los autobuses de hoy reciban refugio, superaremos el número más alto de personas en la historia registrada en el sistema de refugios de nuestra ciudad”.
Frente a este escenario, el alcalde pidió ayuda federal y estatal de emergencia para manejar la continua afluencia de solicitantes de asilo.
A partir de las declaraciones del alcalde Adams, todas las agencias relevantes de la ciudad coordinarán los esfuerzos para responder a la crisis humanitaria y construir los Centros de Ayuda y Respuesta de Emergencia Humanitaria locales.
El estado de emergencia estará vigente por 30 días y puede extenderse, comunicó el alcalde.
La ciudad de Nueva York ahora tiene más de 61.000 personas en su sistema de refugio, incluidos miles sin hogar
Según informó el aclalde Adams durante la rueda de prensa, más de 17 mil solicitantes de asilo han sido transportados en autobús a la ciudad de Nueva York desde la frontera sur desde abril de este año.
El sistema de refugios de la ciudad de Nueva York está operando casi al 100% de su capacidad, dijo Adams.
Ante esta situación, la ciudad espera gastar al menos mil millones de dólares para el final del año fiscal para hacer frente a la afluencia de inmigrantes, dijo el alcalde, y agregó que si los solicitantes de asilo continúan ingresando a la ciudad al ritmo actual, la población total dentro del sistema de albergues superar los 100 mil en 2023.
El alcalde Adams, además, dijo que se dispusieron 42 hoteles como refugios de emergencia y que 5.500 niños migrantes fueron matriculados en distintas escuelas.
La ciudad también está explorando un programa potencial para que los neoyorquinos se ofrezcan como voluntarios para recibir a los solicitantes de asilo y a las personas “sin vivienda” en sus hogares.
“Los neoyorquinos quieren ayudar, y haremos que sea sencillo y fácil para ellos hacerlo”, dijo el alcalde.
El caso Texas
Según reporta la CNN, desde la primera semana de octubre Texas gastó más de 18 millones de dólares en transporte de migrantes, que fueron procesados y liberados por las autoridades de inmigración en las comunidades fronterizas de Texas, a Washington D.C., la ciudad de Nueva York y Chicago.
El gobernador de Texas, Greg Abbott, anunció el programa en abril como parte de su respuesta a las políticas de inmigración de la administración Biden y reconoció que era probable que los contribuyentes pagaran la factura.
Texas trasladó en autobús a más de 11 mil inmigrantes a la ciudad de Nueva York, Washington DC y Chicago desde agosto, según anunció la oficina del aclalde Abbott en septiembre.
La ciudad de El Paso, por ejemplo, transportó a 7.754 migrantes a Nueva York y a 2.091 a Chicago del 23 de agosto al 6 de octubre en 207 autobuses chárter, según comunicó Mario D’Agostino, subgerente de la ciudad de El Paso, en diálogo con la CNN.
La Patrulla Fronteriza procesó a los migrantes a los que se les ofreció los autobuses financiados por la ciudad y los liberó en la comunidad.
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