Actualmente en Estados Unidos las autoridades de salud están vacunando contra el COVID a personas mayores de 12 años, y mientras los pequeños comienzan a retomar labores escolares en la amplia mayoría de escuelas en todos los rincones del país, una de las preguntas que muchos padres de familia preocupados ante el avance de contagios del coronavirus se hacen, es si es posible que sus hijos tengan una dosis reducida de la inyección de Pfizer.
Ese parece ser un cuestionamiento recurrente entre adultos angustiados que intentan buscar manera efectivas para proteger a sus hijos pequeños del coronavirus, según reveló la Administración de Alimentos y Medicamentos de los Estados Unidos (FDA).
A través de un comunicado, la FDA aclaró esa duda, y fue directa en explicar que las dosis deben ser muy precisas a la hora de ser administradas, por lo que actualmente no es posible que simplemente padres de menores de 12 años se acerquen a cualquier proveedor a solicitar una dosis menor para sus pequeños.
“Es posible que los padres se pregunten si pueden pedir a sus proveedores de atención médica que vacunen a sus hijos con una de las vacunas disponibles actualmente fuera de los usos autorizados o aprobados por la FDA”, aseguraron en su misiva la comisionada interina de la FDA, la doctora Janet Woodcock, y el doctor Peter Marks, director del Centro de Investigación y Evaluación de Productos Biológicos de la FDA. “Los padres deben recordar que las dosis de la vacuna que se están estudiando actualmente en niños más pequeños no son las mismas dosis de la vacuna autorizadas para personas de 12 años o mayores, o las aprobadas para personas de 16 años o mayores”.
La FDA quiso advertir y recalcar que aunque entienden la preocupación de los adultos, habrá que esperar para que salga la dosis indicada de vacunación que presentarán las farmaceúticas, y manifestaron que luego ese organismo deberá revisar y analizar los datos, para estar seguros de que son efectivas y seguras para los niños más pequeños.
“Es importante que los ensayos clínicos se completen antes de vacunar a los niños pequeños, para que el equipo de la FDA pueda realizar una evaluación exhaustiva y garantizar que los datos muestren que la vacuna en consideración funciona para prevenir el COVID-19 en niños pequeños y no causa problemas de seguridad inesperados, distintos a los que ya se han observado en adolescentes y adultos”, agregaron los funcionarios del organismo federal en su comunicado.
Hasta ahora no se tiene una fecha exacta para que la vacuna en menores de 12 años sea aprobada, y aunque se espera que ocurra en los próximos meses, la FDA ha urgido a los adultos mayores a no relajar medidas de protección básicas contra el COVID para proteger a los menores.
“Hasta que autoricemos o aprobemos una vacuna para esta población de niños pequeños, es especialmente importante que los padres y otras personas que interactúan cercanamente con niños menores de 12 años se vacunen, usen mascarillas y sigan otras precauciones recomendadas para que podamos proteger a quienes aún no pueden protegerse a sí mismos mediante la vacunación”, destacaron los doctores de la FDA en el comunicado conjunto.
“Es importante que el público reconozca que debido a que los niños pequeños aún están creciendo y desarrollándose, es fundamental que se completen ensayos clínicos exhaustivos y sólidos de tamaño adecuado para evaluar la seguridad y la respuesta inmune a una vacuna contra el COVID-19 en esa población”, concluyeron.