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Las vacaciones de verano de una mujer y su familia en Tampa en la Florida casi terminan en tragedia, luego de que el pasado martes fuera picada por una mantarraya mientras estaba en la orilla de la playa de Bahía de Ruskin, reportó FOX 13 Tampa Bay.
La mujer identificada como Kristie Cataffo – O’Brien quien ante la insistencia de su esposo porque ingresara al mar, decidió darse un chapuzón, casi pierde la vida cuando este animal marino le clavó su aguijón en la espalda, a una profundidad de diez centímetros, a poca distancia de uno de sus pulmones.
“Tan pronto como llegué al agua, sentí como si algo me hubiera picado”, dijo O’Brien al The New York Post. Según lo que narra la mujer, el agua solo le daba hasta las rodillas, y mientras disfrutaba del refrescante baño sintió un doloroso pinchazo en su espalda que la hizo salir del agua, pero que mientras lo hacía vio la expresión de horror de su pareja. Su esposo veía como la cola del animal colgaba literal de su cuerpo.
“Me dijo: ‘No, no te muevas en absoluto, hay una raya y está sobre ti’”. El esposo sujetó con fuerza al animal pero este más se agitaba, provocando un dolor más intenso en su esposa. “La mantarraya se movía y daba vueltas y cada vez que había una ola o algo que se movía, podía sentir la púa clavarse en mi espalda”, dijo Kristie O’Brien, según The New York Post.
Kristie O’Brien said she thought about ‘The Crocodile Hunter’ Steve Irwin, who was killed by a stingray in 2006, when she was impaled by a stingray barb this week.
De acuerdo con Fox 13 News, ella le dijo al medio de comunicación que con la mantarraya visiblemente agitada, sabía que no debía moverse y le dijo a su esposo que no sacara la púa.
“Estaba tratando de mantener la calma lo más que podía”, dijo O’Brien, “pero estaba segura de que iba a morir porque, quiero decir, como todo el mundo tiene esta foto de (el cazador de cocodrilos de la televisión) Steve Irwin cuando literalmente fue perforado en su pecho.”
Llamaron al 911, pero el matrimonio señaló que luego de 45 minutos de espera los paramédicos llegaron en su ayuda encontrando como única manera segura de liberar a O Brien, mutilar la cola del animal desde su base, utilizando unas tijeras, informó Fox 13 News.
De inmediato la trasladaron a urgencias hospitalarias, donde efectivamente un equipo de traumatólogos extrajo quirúrgicamente la púa venenosa de la mantarraya. Los galenos le dijeron a la víctima que era la primera vez que trataban una picadura de estas proporciones, pues era raro que las mantarrayas empalaran la parte superior de un bañista, pues usualmente se da en los pies.
Kristie fue hospitalizada y hasta este viernes 25 de agosto, estaba siendo tratada por envenenamiento. O’Brien además indicó que permanecerá internada en el centro médico de St Joseph en Tampa durante siete días para prevenir cualquier tipo de infección bacteriana proveniente de las aguas marinas.
“Todavía duele muchísimo allí. Es como arrebatos de dolor. Y dicen que eso se debe sólo a la toxina que en realidad se encuentra en la púa de la raya”, aseguró, agregando que siendo residente del estado de la Florida, no está temerosa de volver a entrar al mar.
“Volveré al agua otra vez, probablemente (solo) no a la bahía. Probablemente no estaré nadando en la bahía”, dijo. “Pero quiero decir, las rayas están ahí fuera y nosotros estamos en su entorno”.
Florida woman Kristie Cataffo-O’Brien impaled by ‘super painful’ venomous stingray
Entre tanto, informó Univision, que su esposo Thomas O’Brien creó una cuenta de ayuda en GoFundMe, para pagar las facturas del hospital, y para sortear los gastos mientras ella vuelva a trabajar.
En la misma, Thomas declaró que la mantarraya parecía herida cuando Kristie se reclinó en el agua para mojarse el cabello, lo que explica que la picadura fuera en la parte superior de la espalda. Añade que es posible que la mujer tenga daño en los nervios, como resultado del accidente.
“Hola a todos, estoy recaudando fondos para mi esposa Kristie después de que una raya le picara en la espalda. La mantarraya estaba herida y moribunda cuando Kristie se reclinó en el agua para mojarse el cabello, y la mantarraya la alcanzó con dos púas en el músculo de la parte superior de la espalda. La púa penetró unos ocho centímetros dentro de ella y no llegó a su pulmón por tres centímetros. Es posible que tenga daño en los nervios, es demasiado pronto para saberlo. Kristie es enfermera viajera y tiene que retrasar su próxima asignación al menos tres semanas. Estamos iniciando este gofundme para ayudar con las facturas médicas y los gastos mensuales mientras ella esté sin trabajo. Gracias”.
GoFundMeGoFundMe
Hasta el momento de esta publicación, se ha podido recaudar $1,624 dólares de una meta de $5,000.
Finalmente, la Comisión de Conservación de Pesca y Vida Silvestre de Florida cree que, por el color y tamaño de la mantarraya, se trató de una del sur, una especie no agresiva que ataca con su púa cuando percibe una amenaza. La recomendación de esta entidad para los bañistas es de practicar el “baraje de mantarrayas” para reducir las posibilidades de pisar una mantarraya.
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