El presidente de los Estados Unidos de América, Joe Biden, planea la retirada de las todas las tropas estadounidenses que quedan desplegadas en Afganistán, antes de que se cumpla el vigésimo aniversario del ataque terrorista de los talibanes a la Torres Gemelas en Nueva York, ocurrido el 11 de septiembre de 2002.
“Soy el cuarto presidente de Estados Unidos que tiene que lidiar con la presencia de tropas estadounidenses en Afganistán. Dos republicanos, dos demócratas. No pasaré esta responsabilidad a un quinto”, dijo Biden este miércoles desde la Sala Roosevelt de la Casa Blanca.
“No podemos continuar el ciclo de extender o expandir nuestra presencia militar en Afganistán con la esperanza de crear las condiciones ideales para nuestra retirada, esperando un resultado diferente”,destacó Biden en declaraciones citadas por Univisión.
“La guerra en Afganistán nunca tuvo la intención de ser una empresa multigeneracional”, comentó el president, según reseñó CNN. “Fuimos atacados. Fuimos a la guerra con metas claras. Logramos esos objetivos (…) Bin Laden está muerto y Al Qaeda está degradada en Afganistán y es hora de poner fin a la guerra eterna… No podemos continuar el ciclo de extender o expandir nuestra presencia militar en Afganistán con la esperanza de crear las condiciones ideales para nuestra retirada, esperando un resultado diferente”.
“La solución en Afganistán no es militar”, aseguró por su parte la Casa Blanca, tras 20 años de guerra. La retirará al Ejército estadounidense se da tras una guerra que habrá durado 20 años y dejado cerca de 160.000 víctimas mortales, entre soldados y civiles, según la Universidad de Brown de Estados Unidos, informó France 24.
El mandatario demócrata hizo el anuncio formalmente este miércoles, según detalló su portavoz Jen Psaki. “El presidente ha sido coherente en su opinión de que no hay una solución militar para Afganistán y de que hemos estado allí durante demasiado tiempo”, señaló, según DW.
Aunque la fecha pactada para la retirada de las fuerzas armadas restantes en este país la había pactado el exjefe de la Casa Blanca Donald Trump con los talibanes en febrero de 2020 para el próximo 1º de mayo, una fuente oficial aseguró que el presidente Joe Biden tardará cinco meses más para hacerla efectiva, pues el mandatario se prepara para una marcha ordenada que permita continuar con el apoyo al ejército afgano a riesgo de que los rebeldes talibanes reaccionen en forma violenta. Retirar todas las tropas y su equipo en las próximas tres semanas, junto con los socios de la coalición que no pueden salir por su cuenta, sería logísticamente difícil, como sugirió el propio Joe Biden a fines de marzo.
“Va a ser difícil cumplir con la fecha límite del 1 de mayo”, dijo. “Solo en términos de razones tácticas, es difícil sacar a esas tropas”. De manera reveladora, agregó: “Y si nos vamos, lo haremos de una manera segura y ordenada”, dijo en declaraciones citadas por CNN.
Es de señalar que, en la actualidad, funcionarios estadounidenses informan que, en el país de oriente medio, se hallan acerca de 2.500 soldados, pero además establecen que se encuentran otros centenares de miembros de las fuerzas de operaciones especiales que colaboran con la CIA en misiones antiterroristas, de los que no se ha establecido que pasara con ellos, pues son tropas no reconocidas públicamente, y no hacen parte del listado formal de los 2.500 uniformados por retirar, informó CNN.
Por su parte la OTAN que tiene desplegados en Afganistán unos 10.000 efectivos, también se pronunció en la intención de desplegar sus uniformados extranjeros de este territorio, por lo que, desde la capital de Bélgica, el Secretario de Estado, Antony Blinken dijo que trabajará junto a sus aliados para llevar a cabo una “retirada segura, decidida y coordinada”.
De hecho, el señor Antony Blinken, dijo que había llegado el momento de que las fuerzas estadounidenses regresasen “a casa”, y que Washington elaboraría un plan de retirada “coordinado” con sus aliados de la OTAN, informó la agencia de noticias AFP.
“Juntos hemos alcanzado los objetivos que nos propusimos. Y ahora es el momento de traer a casa a nuestras tropas”, dijo Blinken antes de mantener conversaciones con sus socios de la OTAN en Bruselas, según El Periódico.
La guerra más larga de los Estados Unidos
La guerra de Afganistán, la comenzó el expresidente republicano George W. Bush, el 7 de octubre de 2001 como una retaliación en contra de Al Kaeda y los Talibanes por haber cometido el acto terrorista de estrellar dos aviones comerciales contra las Torres Gemelas y el Pentágono.
En consecuencia, Estados Unidos tomó el liderazgo para hacer un llamado a la comunidad internacional por crear una gran coalición de países que lucharan en contra del grupo extremista, y por expulsar a los talibanes del territorio afgano, pero trascurridos 20 años de enfrentamientos bélicos que han dejado más de 2.000 soldados estadounidenses muertos, la intención de derrotar este grupo no se ha cumplido. De hecho, Barack Obama, heredó este conflicto, fijando 2011 como la fecha de regreso de las tropas al país, pero tuvo que desdecirse y Donald Trump, que llegó al Despacho Oval decidido a honrar su promesa de cesar las “guerras lejanas”, también tuvo que cambiar el paso por la inestabilidad del país y la amenaza terrorista.
Ahora que Joe Biden recibe en su administración este conflicto, su búsqueda está en por fin dar termino a esta guerra, pese a todos los riesgos y dificultades que ello implica. Explica Antony Blinken, un funcionario de la Casa Blanca que “El presidente juzgó que un enfoque basado en las condiciones, que ha sido el de las dos décadas pasadas, significaría permanecer en Afganistán para siempre”, informó El País.
La respuesta de los Talibanes
Entretanto, frente al anuncio del ejecutivo de los Estados Unidos, el grupo de los talibanes reclamó este miércoles al mandatario dar cumplimiento al calendario de retirada de sus tropas, fijado en el acuerdo de paz pactado en el mes de febrero de 2020. “El Emirato Islámico de Afganistán busca la retirada de todas las fuerzas extranjeras de nuestra patria en la fecha especificada en el Acuerdo de Doha”, ha dicho el portavoz de los insurgentes, Zabihulá Muyahid a través de una serie de mensajes en su cuenta en la red social Twitter, en referencia al 1 de mayo.
Asimismo señaló Muyahid que “si se cumple el acuerdo, se encontrará también un camino para abordar el resto de los asuntos”. “Si el acuerdo es violado y las fuerzas extranjeras no abandonan nuestro país en la fecha específica, se sumarán los problemas y los que no cumplieron con el acuerdo serán responsables”, ha advertido, según COPE.
Finalmente, en referencia a la participación en la conferencia de paz que desarrollara Turquía, Catar y la ONU el 24 de abril y 4 de mayo en la ciudad de Estambul, y cuyo objetivo está encaminado a determinar “una hoja de ruta para un futuro acuerdo político y el fin del conflicto entre la República Islámica de Afganistán y los talibanes”, Mohammad Naeem, portavoz de la oficina de los talibanes en Qatar, dijo que los insurgentes no participarán en ninguna conferencia sobre el futuro de Afganistán “hasta que todas las fuerzas extranjeras se retiren por completo de nuestra patria”.
LEER MÁS: Caso Daunte Wright: ¿Enjuiciarán a la exoficial Kim Potter por homicidio o no?