El paso del huracán Idalia por el estado de la Florida, en Estados Unidos, no solo afectó a los ciudadanos del común, sino que la mansión del gobernador del estado, Ron DeSantis en Tallahassee, también fue blanco de los estragos del fenómeno climático, reportó Semana.
A través de la red social X, antes llamada Twitter, la primera dama del estado, Casey DeSantis, compartió una fotografía en la que muestra un roble centenario caído sobre parte de su residencia ubicada a pocas cuadras del Capitolio del Estado de la Florida.
El mensaje que acompañó la publicación fue: “Un roble de 100 años cae en la Mansión del Gobernador en Tallahassee. Mason, Madison, Mamie y yo estábamos en casa en ese momento, pero afortunadamente nadie resultó herido. Nuestras oraciones están con todos los afectados por la tormenta”.
El gobernador que después de que Idalia tocara tierra daba una rueda de prensa en Perry para informar sobre el balance del desastre natural, fue abordado por los periodistas para interrogarle sobre lo sucedido en su mansión, de acuerdo con CBS News.
De acuerdo con Univision, DeSantis, confirmó lo sucedido, señalando que su esposa y sus hijos Mason, Madison y Mamie, estaban en la mansión cuando cayó el árbol, pero que afortunadamente nadie había resultado herido.
“Ella me llamó hace unos 45 minutos y me dijo que un roble realmente, supongo, antiguo, se dividió por la mitad y una parte de él cayó. No sé si cayó directamente sobre la residencia, creo que fue un poco hacia un lado”, dijo.
Además, el gobernador explicó que el árbol había estado por mucho tiempo en la propiedad y que su hija mayor había disfrutado de jugar en el cuando era pequeña, pero que así tuvieran mucho pesar por la posibilidad de que fuera talado, el lado positivo era que habría más espacio en el jardín para que los chicos jugaran, informó The New York Post.
“Si talan todo el árbol, habrá más espacio para que mis hijos puedan jugar pelota de béisbol”, dijo. “Y entonces, en algunos aspectos para nosotros, aunque el árbol era bonito, probablemente nos las arreglaremos y estaremos bastante bien”.
Cabe resaltar, que la residencia DeSantis, fue construida en el año 1907 y luego reconstruida en 1955 después de que su estructura se deteriorara. Está en el Registro Nacional de Lugares Históricos y fue diseñado por el arquitecto de Palm Beach, Sims Wyeth, en un estilo neogriego.
De otro lado, seguido a la declaración de la propia experiencia del gobernador y su familia con el huracán Idalia, el mandatario pasó a abordar lo que fue la llegada del mismo a la Florida.
Según The New York Post, si bien Idalia se había debilitado antes de llegar a la capital de Florida, partes de la ciudad fueron azotadas por lluvias torrenciales y vientos azotadores.
DeSantis dijo que la ciudad de 200.000 habitantes probablemente esquivó una bala después de que algunas proyecciones iniciales mostraran que Idalia se estrellaba directamente contra ella. “Ha habido lluvia y viento”, dijo. “Hay algunos escombros. Pero nada como si ese muro hubiera impactado en Tallahassee. Creo que habrías visto muchos más daños”, según El Español.
Al final del día miércoles, se dio a conocer que el paso del huracán por la Florida dejó a dos víctimas mortales, a miles de ciudadanos sin electricidad, varias zonas inundadas, y cientos de personas rescatadas por la Guardia Nacional, dijo El Español.
Las dos personas fallecidas, perdieron la vida en accidentes de tránsito consecuencia de las intensas lluvias, y los arrasadores vientos.
De hecho el reporte de la patrulla de carreteras, indica que en el condado de Pasco, una de las víctimas a bordo de su camioneta Ford Ranger, fue estrellado contra un árbol, mientras que en el condado de Alachua, un hombre de 59 años, conductor de una Toyota Tacoma, chocó y murió debido a las condiciones extremas de lluvia, informó El Español.
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