La economía de los Estados Unidos sufrió una importante retracción durante el primer trimestre del 2022, periodo durante el cual el Producto Bruto Interno (PBI) se redujo en un 1,4 por ciento, según los datos compartidos este jueves por la Oficina de Análisis Económico (BEA, por sus siglas en inglés).
“La estimación del PBI publicada hoy se basa en datos fuente que están incompletos o sujetos a revisión adicional por parte de la agencia fuente”, advierte el BEA en un comunicado de prensa. También anunciaron una “segunda” estimación para el primer trimestre, basada en datos más completos, que se publicará el próximo 26 de mayo.
Según el citado organismo, la disminución del PBI reflejó disminuciones en la inversión en inventarios privados, las exportaciones, el gasto del gobierno federal y el gasto de los gobiernos estatales y locales. En tanto que las importaciones, que representan una sustracción en el cálculo del PBI, aumentaron. La misma tendencia marcaron los gastos de consumo personal (PCE), la inversión fija no residencial y la inversión fija residencial.
El impacto del COVID-19 en la economía de Estados Unidos durante el primer trimestre de 2022
En cuanto a la influencia del COVID-19 en la economía estadounidense entre enero y marzo de este año, el BEA concluyó que un aumento en los contagios relacionados con la variante Ómicron resultó en continuas restricciones e interrupciones en las operaciones de los establecimientos en algunas partes del país.
Los pagos de asistencia del gobierno en forma de préstamos condonables a empresas, subvenciones a gobiernos estatales y locales y beneficios sociales a los hogares disminuyeron a medida que expiraron, o redujeron las disposiciones de varios programas federales.
De acuerdo al documento compartido por el BEA, los efectos económicos completos de la pandemia de COVID-19 no se pueden cuantificar en la estimación del PBI para el primer trimestre porque los impactos generalmente están integrados en los datos de origen y no se pueden identificar por separado.
Los resultados de este trimestre contrastan con el ritmo de crecimiento del 6,9% que se registró en el último trimestre del año pasado, según reporta la CNN.
El presidente Joe Biden señaló que la economía estadounidense es “resistente frente a desafíos históricos”
A pesar de la contracción económica expuesta por los datos recogidos por el BEA, el presidente Joe Biden señaló que la economía estadounidense es “resistente frente a desafíos históricos”, en un comunicado que emitió en la mañana de este jueves.
“Si bien a la estimación de crecimiento del último trimestre la afectaron varios factores técnicos, Estados Unidos enfrenta los desafíos del covid-19 en todo el mundo, la invasión no provocada de Ucrania por parte de Putin y la inflación global desde una posición de fortaleza”, reza el mensaje oficial del mandatario.
“Necesitamos seguir progresando: reducir los costos para las familias trabajadoras, ganar más en Estados Unidos y crear empleos bien remunerados con los que pueda criar una familia de clase media”, consideró Biden en su pronunciamiento.
Por último, se manifestó en contra de la postura de los republicanos del Congreso, encabezados por el senador Scott, quienes consideran que la forma de combatir estos desafíos globales es aumentar los impuestos a las familias de clase media, incluida la mitad de los propietarios de pequeñas empresas. En contrapunto, Biden considera necesario que el Congreso debería enviar a su escritorio un proyecto de ley de innovación bipartidista para reforzar las cadenas de suministro y hacer más en Estados Unidos.
“Y el Congreso debe aprobar una legislación para reducir los costos y reducir el déficit, reduciendo las facturas de servicios y medicamentos recetados de las familias y restaurando la equidad en nuestro código fiscal, sin aumentar los impuestos a nadie que gane menos de $400,000 por año”, completó.
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