Donald Trump y Kamala Harris debatirán el 10 de septiembre

Trump acusa a Kamala de usar IA para crear gente falsa en sus eventos

Getty Kamala Harris y Donald Trump

El candidato a la presidencia de los Estados Unidos, el republicano Donald Trump reconsideró su “NO” a los debates con la candidata por el partido demócrata y actual vicepresidenta Kamala Harris.

Donald Trump anunció el pasado jueves 8 de agosto de 2024, que asistirá al debate político de la cadena televisiva ABC News el próximo martes 10 de septiembre de 2024, dejando así de un lado la disputa legal que tiene con este medio de comunicación.

“Creo que es muy importante tener debates”, dijo Donald Trump el jueves, según WFLA. “Espero con ansias los debates porque creo que tenemos que dejar las cosas claras”.

Mientras tanto Kamala Harris respondió en su cuenta de X, según Democracynow.org: “Oigo que Donald Trump finalmente se ha comprometido a debatir conmigo el día 10. Tengo muchas ganas de que llegue ese momento: Espero que asista”.

El próximo debate entre Donald Trump y Kamala Harris no solo será un enfrentamiento entre dos visiones opuestas para el futuro de Estados Unidos, sino también una prueba de la resistencia del sistema democrático estadounidense y más después de la retirada de Joe Biden o el atentado que sufrió Trump, según El País.

De acuerdo con Euro News, mientras el país se prepara para este histórico encuentro, analistas y ciudadanos por igual esperan con anticipación ver cómo se desarrollará este capítulo único en la historia política estadounidense. El debate del próximo 10 de septiembre no solo será un duelo de ideas y personalidades, sino también un momento definitorio para el futuro de la democracia americana, en cierta manera, también del resto del mundo.

Los otros dos debates están programados para el 4 de septiembre con la cadena conservadora FOX News, y para el 25 de septiembre en la cadena NBC.

Una gran prueba para ambos candidatos presidenciales

La preparación del debate del próximo 10 de septiembre de 2024, suponiendo que se celebre, será intensa, y la naturaleza truncada de la nueva campaña significa que podría crear otro punto de inflexión histórico en el menguante camino hacia la Casa Blanca.

Donald Trump ya está jugando su idiosincrático juego de expectativas de denigrar las habilidades de su oponente, que podría ser la primera mujer negra y la primera presidenta de Asia meridional. En una rueda de prensa celebrada este jueves en su complejo turístico de Mar-a-Lago, comparó desfavorablemente a Kamala Harris con Joe Biden, de quien sostenía desde hacía tiempo que carecía de la agudeza mental necesaria para ejercer el cargo.

“Ella no es tan inteligente como él. Por cierto, tampoco creo que él sea muy inteligente. No soy un gran admirador de su cerebro”, dijo Trump.

El enfrentamiento también se perfila como una prueba extrema para Kamala Harris. La vicepresidenta tiene un historial mixto en los debates: se desempeñó muy bien en tales eventos a principios de su fallida campaña presidencial de 2020. Pero en otros, luchó. Y sus momentos más poco favorecedores en el cargo han llegado cuando se le ha pedido que explique sus posiciones o responda a preguntas difíciles en entrevistas importantes.

Pero a medida que crece su confianza como candidata demócrata, Kamala Harris es una política más consumada de lo que era hace cuatro años, y sus partidarios están ansiosos por verla aprovechar sus habilidades como exfiscal para atacar al expresidente, cuatro veces acusado.

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