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Un caso que conmociona a la comunidad de Hialeah, estado de la Florida, Estados Unidos, tiene perplejos a los agentes de policía que todavía tratan de entender el motivo que llevo a un adolescente de 13 años de edad a causarle la muerte a su propia madre, propinándola varias heridas con arma blanca.
El menor de edad, identificado como Derek Rosa, caracterizado por ser un buen chico, y con honores estudiantiles, llamó al el pasado 12 de octubre a la línea de emergencias del 911 cerca de las 11:30 de la noche para reportar que él mismo había apuñalado a su mamá, identificada como Irina García de 39 años de edad, dentro de su propio apartamento ubicado en Amelia Oaks, del 211 W. 79th place, pero que su hermanita una bebé de 14 días de nacida, estaba bien porque él no le había hecho nada, informó People.
El asesinato de una mujer a manos de su propio hijo de 13 años en Hialeah tiene consternada a la comunidad del sur de Florida. Irina García, de 39 años, y quien tenía una bebé de 14 días de nacida, fue asesinada a cuchillazos por su otro hijo, Derek Rosa.
De inmediato la policía se hizo presente en el lugar encontrando a la mujer tirada en el piso y con múltiples heridas causadas por un cuchillo, que más tarde el mismo Derek declaró en la estación del Departamento de Policía de Hialeah haber tomado de la cocina.
El adolescente indicó que mientras su madre estaba dormida se lanzó sobre ella y la apuñalo en su cuello cortándole una arteria que sangró profusamente hasta causarle la muerte. Dijo que seguido buscó dos armas de fuego de propiedad de su padrastro con la firme intención de dispararse, y causarse la muerte, pero que finalmente no tuvo el valor de hacerlo.
El chico además declaró que tomó fotos del cadáver y se las envió a un amigo a través de sus redes sociales, le dijo que había asesinado a su mamá. Esta evidencia será determinante para esclarecer los móviles del crimen, de acuerdo con LaPrensa.
“¿Por qué mataste a tu mamá?”, le pregunta la operadora del 911 a Derek Rosa, el adolescente acusado de matar a su mamá, Irina García, acuchillándola mientras dormía. Esta es la llamada al 911, advertimos que es contenido sensible.
Un vocero de la policía dijo que habían hablado con la familia de Derek y que les habían dicho que él era un chico ejemplar, según Univision.
“Tiene notas excelentes, no ha tenido problemas en el pasado, no ha tenido problemas en casa. En el pasado tampoco ha tenido un historial de salud mental. Entonces ahora los investigadores están tratando de ver por qué hizo lo que hizo”.
Derek Rosa actualmente está en detención preventiva en una cárcel juvenil, se enfrenta a cargos por asesinato en segundo grado con un arma, y a la espera de su audiencia programada para el próximo 2 de noviembre. Por su parte la bebé, pasó bajo la custodia de su abuela materna y su padre.
A 13-year-old from Florida, honor roll student, Derek Rosa, is arrested for allegedly stabbing his mother, Irina Garcia, to death as she slept beside her newborn daughter. #Florida #CrimeNews
Revelan el audio de la llamada del joven
Despachador: Necesito saber si tu mamá está respirando.
Derek Rosa: Está muerta, señorita.
Operadora: Ok, ¿y por qué has hecho eso?
Rosa: Hay sangre por todo el suelo.
Más adelante en la llamada, Rosa dijo que había una pistola en el salón y que intentó dispararse.
“La cargué, tiré hacia atrás de la corredera, pero no disparé”, dijo al despachador.
Más tarde le dijo que había hecho fotos después del asesinato y se las había enviado a un amigo:
Rosa: ¿Señorita?
Despachador: Sí.
Rosa: Tomé fotos y se lo conté a mis amigos. ¿Estuvo mal?
Encargada: ¿A quién se lo contaste?
Rosa: A mi amigo.
Encargada: ¿A tu amigo? ¿Le enviaste fotos a tu amigo sobre lo que hiciste?
Despachador: Sí.
Rosa dice entonces que envió las fotos a un “amigo online”.
“No sé su nombre real porque es un amigo online con el que juego mucho”, dijo al despachador. “No borré las fotos de mi teléfono, pero se las envié y le dije que lo sentía y adiós. Adiós a él”. Más tarde le dijo al despachador que estaba “muy triste” por lo sucedido.
Cuando la policía de Hialeah llegó al apartamento, se oye a Rosa preguntar al despachador: “Señorita, ¿me van a matar?”.
“No, no te van a matar”, responde el despachador.
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