Ahoramismo.com Empresa deberá pagar 450 mil dólares a un empleado que tuvo un ataque de pánico tras un cumpleaños sorpresa.
Una nueva tragedia relacionada con armas enluta a Estados Unidos, luego de que la tarde de este viernes un sujeto abriera fuego de manera indiscriminada en el centro municipal de la ciudad de Virginia Beach, en el estado de Virginia.
Las primeras informaciones suministradas por las autoridades daban cuenta de 12 personas muertas, 11 de ellas murieron de forma instantánea en el lugar de los hechos, mientras que la otra persona falleció en momentos en que estaba siendo trasladada al hospital.
Así lo reveló el director de la policía de Virginia Beach, Jim Cervera, quien convocó a una rueda de prensa la noche de este viernes, donde manifestó con profundo dolor que las acciones del atacante acabaron con la vida de una docena de inocentes. Asimismo, el oficial confirmó que el sospechoso de haber perpetrado el terrible crimen, fue abatido por los uniformados.
El hecho se registró a eso de las 4:30 de la tarde.
La policía informó además que el tiroteo dejó seis civiles heridos, pero no precisaron la gravedad que representan. Asimismo se conoció que un policía recibió heridas, pero afortunadamente su chaleco anti-balas evitó que perdiera la vida.
El alcalde de la localidad, Bobby Dyer, lamentó lo sucedido y aseguró que no solamente para esa ciudad sino para todo el país es un momento de profundo dolor.
“Este es el día más devastador en la historia de Virginia Beach. Las personas que resultaron afectadas son nuestros amigos, compañeros de trabajo, vecinos, colegas”, aseguró el mandatario local.
Los agentes de policía que llegaron hasta el lugar manifestaron que persiguieron al atacante por varios pisos y luego fue abatido. Tras el brutal ataque, los uniformados encontraron una pistola semiautomática y un rifle, con los que se presume el individuo realizó el tiroteo.
Una fuente del gobierno aseguró al canal CNN que el perpetrador de las dantescas escenas era un “empleado descontento”, del área de servicios públicos, quien tenía su empleo hacía varios años, aunque hasta ahora no se ha revelado su identidad.
El gobernador de Virginia, Ralph Northam llegó hasta el lugar de los hechos y calificó lo sucedido como un acto “horrible” y envió las condolencias a las familias de las víctimas