La pelea entre Frida Sofía y Alejandra Guzmán es más seria de lo que muchos pensaban. Y es que luego de que el público ha sido testigo de los ataques mutuos entre la cantante y su única hija, la Reina de corazones acaba de hacer una confesión que dejó a más de uno de una sola pieza: su hija la agredió.
“Es difícil cuando hay golpes de por medio, cuando ya hay agresión que ya uno no sabe a donde pueda llegar, por eso me alejé”, dijo la cantante, en diálogo con el programa de televisión El Gordo y la Flaca, donde aseguró que por su seguridad prefiere estar separada de Frida. “He tratado de comenzar una nueva relación porque la que hay ya no tiene respeto, me alejé porque en algún momento me iba a hacer daño”.
Y por si fuera poco, la Guzmán reveló que su hija tiene problemas con el consumo de alcohol, lo que habría hecho que cambiara su personalidad y se volviera violenta.
“Yo creo que hay mucho alcohol y muchos resentimientos. Muchas cosas que ella no ha perdonado y que no ha querido ver. Pero de que he estado ahí, he estado ahí”, dijo la intérprete de “Hacer el amor con otro”.
Y ante los cuestionamientos del reportero, la hija de Silvia Pinal comentó que pese a sus diferencias, ella jamás desamparó económicamente a su hija e incluso la ha sacado de la cárcel cuando Frida se ha metido en problemas con la ley.
“Es un orgullo para mi poderle pagar dos carreras, es un orgullo para mi poder ayudarla a divorciarse, es un orgullo para mi poder sacarla del bote”, dijo la cantante.
Y al ser interrogada sobre si está dispuesta a volverse a hablar con su hija, la Guzmán dejó ver que tiene toda la voluntad del mundo para poder reconciliarse con su retoño.
“Que Dios los bendiga porque todo lo que uno hace se le regresa, sea bueno o sea malo. Que tengan el valor para afrontar las cosas directamente. Si tienen algún problema conmigo, aquí estoy”, dijo la roquera.