Desde que Adamari López conoció a Toni Costa en el reality show Mira Quién Baila, la parejita se convirtió en una de las más queridas y estables del mundo del entretenimiento, pero sin duda y más allá del inmenso amor que el bailarín profesa por la animadora, su rol como papá de la pequeña Alaia derrite hasta a los más duros.
Así lo pueden ver los fans del español a través de los múltiples mensajes que Toni comparte en su cuenta de Instagram, donde su hijita es la protagonista.
Toni se ha robado el amor y la admiración de su público por esa faceta que como ha revelado él mismo, es la que más lo llena de felicidad.
Pero es un collage de varias imágenes del coreógrafo y su hijita la que más se ha robado el show, pues resume lo bien que se llevan y la entrega abnegada que como padre Toni le pone a cada momento con su preciosa nena.
“Así o más rico!!!!!! Esto es lo que pasa cuando nuestra preciosidad @alaia se pasa a la cama de los papis y @adamarilopez cuando se va a trabajar se dedica a hacernos fotos durmiendo. A quién le pasa esto con sus hijos??????????”, comentó Costa sobre la imagen que encantó a miles de seguidores suyos y de la conductora de Un Nuevo Día.
En otra divertida imagen, en la que Alaia parece el cloncito de su mami, Toni bromeó y dijo: “Aquí claramente se ve que Alaïa sacó el mismo color de ojos que yo…… @alaia @adamarilopez#familiacostalopez #todossomostios #adamarilopez #alaiacostalopez#tonicosta”.
Y en otra imagen, donde Toni volvió nuevamente a manifestar lo feliz y bendecido que se siente de haber conformado un bello hogar junto a su amada Adamari y su hijita.
“Hoy en el Festival de la escuela de #Alaïa , la princesa lo hizo genial!!! Y @adamarilopez ya se encargó de que el año que viene yo sea el coreógrafo del festival. Un nuevo reto, yo puedo!!!!! Te amamos @alaia”.
En una reciente entrevista con People en Español, Toni Costa confesó que desde que se convirtió en padre su vida se volvió más feliz.
“No sabía que ser papá fuera tan divertido. Es como volver a tu infancia, volver a hacer cosas que sin tener un hijo no haces. Ir a un parque que te tiras por ahí”, dijo Costa. “Es recordar la infancia de uno pero con la madurez de ser papá, protegiéndola, cuidándola”.