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Con un “incendiario” capítulo final llegó a su episodio número 13, la serie transmitida por la cadena Telemundo “El Recluso”.
Protagonizada por el actor Ignacio Serricchio y Ana Claudia Talancón, el thriller carcelario contó la historia de Lázaro Mendoza, un exmarine estadounidense que ingresó a una prisión de máxima seguridad en México (La Rotunda) bajo una identidad falsa y acusado de un supuesto triple homicidio.
La misión del ex militar, era infiltrarse dentro de una peligrosa pandilla de presos y custodios que operaba dentro y fuera del mencionado penal. Ellos fueron los responsables del secuestro de Linda Morris, la hija del juez corrupto estadounidense (John Morris). Había mucha expectativa sobre esta última entrega de la serie y muchas interrogantes: ¿Dante logró escapar de la cárcel? ¿Encontró el dinero de Tavares? ¿Se reencontró con su hijo? ¿Qué pasó con Santito”? Te lo contamos aquí.
Lo que tienes que saber:
Linda Morris y Frida rescatan al hijo de Lázaro
El hombre que tenía secuestrado al hijo de Dante golpeó a Linda Morris y amenazó con un arma a la trabajadora social para que le dijera quien era y que estaba haciendo allí. En el interín del forcejeo con la hija del juez, la señora que cuidaba del pequeño tomó el arma y mató al hombre que estaba extorsionando a Lázaro para que le diera el dinero de Tavares a cambio de la libertad de su hijo. La norteamericana se queda allí y le agradece a Frida todo lo que hizo para ayudar al ex marine. Le manda con ella una nota de agradecimiento y amistad al “Bocinas”.
Peniche celebra que tendrá un ascenso y presiona a Dante
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En la cárcel, Roxana la secretaria del director del penal (Peniche), está muerta de miedo, pensando que la van a responsabilizar de la muerte del Procurador Valencia, pero el tramposo de su jefe le muestra los reportes de prensa que indican que el viejito murió de un infarto en su casa leyéndole un cuento a su nieto. Ambos celebran que la situación no pasó a mayores y Peniche quien de nuevo le ofreció a Lázaro dejarlo libre si le conseguía el dinero que tenía escondido Tavares, le anuncia a su empleada que le subirá el sueldo, porque con la muerte del anciano él será ascendido a Sub -Procurador.
Lázaro al fin se reencuentra con su hijo Pablito
En la biblioteca de la Rotunda se reencuentran Lázaro y su hijo, gracias a la ayuda de Frida, quien le cuenta todo lo que pasaron para poder traer al pequeño. Ella le dice que se siente cómplice de un asesinato, que no sabe en que momento se metió en toda esa situación. Él le pide paciencia que tiene una idea para escapar de allí. Le promete que le demostrará a ella que todo ha valido la pena. La besa.
El chino le dice a Santito quién es en realidad Dante
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Santito al fin consigue la manera de comunicarse con El Chino utilizando una aplicación que traduce al español, y el hombre le cuenta que vino a matar a Dante porque él es en realidad Lázaro Mendoza, un ex marino estadounidense que mató a su familia y él no lo va a dejar con vida. Indignado Santito le dice al hombre que Dante no se va a burlar de él, que se va a cobrar el engaño porque el lo había integrado a su familia. En ese momento, Dante viene por el ahijado de Tavares y le dice que él le mintió que lo del anillo era una excusa para poder encontrar un lugar donde guardar una merca. Le pide que lo ayude a encontrar un sitio y le dará una parte del dinero de la venta.
Por su parte, Santito le hace el juego y le dice que sabe dónde guardarla. Se van los tres (El chino, Santito y Dante) a un lugar apartado de la cárcel. Santito le dice al chino que pase por un agujero que hay en una pared y lo apuñala hasta matarlo. Acto seguido, le saca al inflitrado un arma y le dice que sabe toda la verad que vino a joderlos, que se burló de él que le ofreció su amistad. Lo derriba, mientras Dante trata de convencerlo diciéndole que él lo considera de su familia, como su amigo, como un hermano, que lo ayude a salir de ahí, pero éste le da un cachazo con su arma y al verlo en el piso lo carga hasta su celda, donde planeaba asesinarlo.
Tavares desata un infierno en la prisión y daña a quien más quiere
EL mandamás de todos los reclusos, desata su ira contra la Unión por la muerte del padre de Santito. Se prepara con sus hombres para darle una estocada final a sus rivales y arranca apuñalando a “Balin” a quien también le prende fuego. En llamas se lo manda al lado del penal donde está la pandilla de la Unión viendo un juego de fútbol. Con Gasolina y disparos van convirtiendo los pasillos del penal en charcos de sangre, muerte y terror.
Tavares y Santito Telemundo
El cabecilla de la Unión, Cuahtemoc, es herido por Tavares ,quien comienza a disparar a diestra y sinisestra sin darse cuenta que entre ellos se encontraba su ahijado, quien venía de dejar a Dante en su celda. Santito cae mortalmente herido.
Mientras todo esto sucede, el director del penal, consigue al fin entre las cosas del Tavares el “codiciado dinero”, y se lo lleva.
Dante escapa de la prisión vestido de bombero
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Con el fuego arrasando por todo el pabellón donde están los de la Unión, llegan los bomberos para apagar el incendio. El Santito dejó a Dante desmayado en su celda y aunque saca su arma para acabar con él no pudo matarlo. Vio las llamas muy cerca y pensó que “el traidor” moriría quemado. En eso entró un bombero y le disparó, se puso un camiseta en su cara y saliendo de allí fue herido por su propio padrino quien lo confundió con uno de sus rivales. Lázaro despierta y se viste con la ropa del bombero fallecido y ayuda a trasladar hasta la ambulancia a Santito. En las afueras del penal estaba Frida junto a Roxana y el protagonista de esta historia, le roza la mano a la trabajora social quien se da cuenta de que el bombero es en realidad Lázaro Mendoza quién al fin sale de ese infierno.
FIN.
Aún se desconoce si habrá una segunda temporada de esta historia, pero nosotros los mantendremos al tanto de las novedades.
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