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La natación es considerado uno de los deportes más relevantes y populares dentro de los Juegos Olímpicos. Es por eso que cuando se produce un triunfo inesperado, las imágenes del ganador recorren el mundo con facilidad y con mucha velocidad.
Eso es lo que sucedió cuando el nadador Ahmed Hafnaoui, de Túnez, ganó la competencia de 400 metros libres en el último toque y superó a dos candidatos a ganar la medalla dorada.
El nadador de 18 años, que había clasificado a la fase definitoria en su serie de semifinales en cuarto lugar. En la carrera final, el joven hizo una gran diferencia en los últimos 50 metros y venció al australiano Jack McLoughlin y al estadounidense Kieran Smith, los dos que eran los favoritos en ganar esa carrera y quienes se quedaron con la medalla de plata y bronce respectivamente.
Hafnaoui ganó la final con un tiempo de 3:43.36 -el tercer mejor del 2021 en la distancia- y fue sólo 0.16 segundos más rápido que el australiano, este registró una marca de 3:43.52. Este tiempo superó su mejor marca en su carrera.
Una promesa hecha y cumplida
En joven, que ha sido parte del programa de natación de Tunez desde los 12 años edad, ya había participado en los Juegos de la Juventud en el 2019. Justo fue en ese momento en había dicho en una entrevista con Le Presse de ese país que iba a ser campeón olímpico.
El tema con esa promesa fue que él lo había dicho que los haría en los 800, no los 400.
Una vez que se confirmó que el tunecino había sido el vencedor de la definición, las imágenes de la transmisión mostraron el alocado festejo de su entrenador, que comenzó a correr tomándose con sus dos manos la cabeza, incrédulo.
“No me lo creo, es increíble. Hoy me sentí mejor en el agua que ayer. ¡Soy campeón olímpico!”, afirmó, Hafnaoui en diálogo con la prensa internacional en el flamante Centro Acuático de Tokio 2020.
Hafnaoui elogiado por leyenda
Tan grande fue el triunfo de Hafnaoui, que recibió un elogio increíble. El máximo ganador de medallas en los Juegos Olímpicos, Michael Phelps.
“Fue una carrera increíble. Le quitó cinco segundos a su marca personal,” indicó en una entrevista con los medios. “La gran diferencia entre estas olimpiadas y la previa es que todos en la final tienen la oportunidad de ganar la medalla de oro. No importa si estás en el carril uno u ocho.”
Hafnaoui fue el nadador que clasificó con el tiempo más lento, pero pudo superar a McLoughlin y Smith para poder dar uno de los resultados más inesperados de los Juegos hasta el momento. En la final pudo mejorar ese tiempo por más de dos segundos para dar el golpe en la mesa de la natación olímpica.
“Simplemente metí la cabeza en el agua y ya está. Es increíble, un sueño hecho realidad”, agregó. De esta forma, Hafnaoui se convierte en el segundo campeón olímpico de Túnez en la natación.
El primero fue el recordado Oussama Mellouli, que obtuvo tres medallas en la historia de los Juegos Olímpicos con dos oros y una plata.
Este llegará a su sexta olimpiada y buscará volver a medallar ya que ganó bronce en el 2012. Mellouli terminó arreglando un problema que tuvo con el comité olímpico de su país que lo hizo renunciar a su participación en Tokio hasta la semana pasada.
El nacido el 2002, esta no fue la primera participación olímpica para Hafnaoui. Hace tres años, participó en los Juegos Olímpicos de la Juventud realizados en Buenos Aires 2018. Allí compitió en los 200, 400 y 800 metros libre quedando. En las últimas dos pruebas, fue finalista (quinto lugar en los 400 metros y séptimo en los 800).
El nuevo campeón olímpico también tiene una particularidad, ya que es hijo del exjugador de básquetbol Mohamed Hafnaoui, que jugó con su selección en esta olimpiada.
Tras consagrarse y sorprender al mundo, Hafnaoui volverá al Centro Acuático de Tokio el próximo 27 de julio en la prueba de los 800 metros estilo libre, el evento que es su fuerte.
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