La brutalidad con la que a veces se comportan algunos seguidores del futbol volvió a hacer de las suyas, y esta vez, en un hecho que está siendo repudiado en todo el mundo, el fin de semana una jueza de línea argentina fue quemada con agua hirviendo, en pleno partido.
Medios argentinos reportaron que la jueza Rosana Paz, quien lleva 5 años pitando en Primera División, estaba alineada en el partido entre Marquesado y San Martín, cuando le lanzaron desde la tribuna una botella con agua hirviendo, que le quemó varias partes de su cuerpo.
La agresión se dio cuando faltaba poco para culminar el encuentro y ella estaba parada a un costado de la cancha.
La jueza concedió una entrevista al reportero Alberto Bustelo, del Grupo periodístico E Medios de Argentina, y allí narró los angustiosos momentos que vivió.
“Terminando casi el partido, al último minuto del encuentro, estaba ya por terminar, y en una de esas siento algo caliente que me cae a la espalda. Levanto la bandera, llamo al árbitro, viene a mí, me pregunta que ha pasado, le comento. Hicieron que trajeran agua fría para echarme en la espalda, porque tenía mucho calor, mucho dolor”, comentó la agredida jueza, quien dijo que las cosas hubiesen podido haber sido peores.
“Doy gracias a Dios que tenía una remera (camiseta) abajo, si no se me pega la camiseta de arbitraje. Luego me vieron, tenía una mancha muy colorada. Me llevaron a mi casa y me arrimé a la clínica más cercana que tenia, para que me revisaran. Me sacaron placa por el impacto del golpe, para descartar que tuviera algún traumatismo y verificaron que no tenía nada traumatológicamente, pero sí una quemadura”, dijo la arbitro, agregando que no vio quien le lanzó la botella, pero quien criticó el accionar de quien cometió el hecho.
“Ellos iban ganando, no sé con qué sentido lo hicieron, porque ya llevaban ganado el partido. Nunca me había pasado nada así. A veces te insultan, te dicen cosas lindas, cosas feas, pero algo así no me lo esperaba. Pero ahora como están violentos los tiempos en el futbol, uno tiene que esperarse cualquier cosa, pero yo sea varón, sea mujer, esto no debería de pasar”, concluyó la joven.
Y aunque muchos le sugieren que se aleje de las canchas, la jueza tiene claro que no piensa retirarse de su profesión.
“No, eso lo descarto, para nada. Yo estuve hablando con mi padre y le dije que me costó mucho llegar a donde estoy y esto no me para. Por esto no me voy a retirar”, advirtió la jueza de línea.
Además del ataque en sí, en medios argentinos y en redes sociales han criticado al árbitro del partido, Sebastián Fernández, quien tras conocer lo ocurrido no suspendió el juego y esperó a que se jugaran los dos minutos que restaban para actuar.