El gobierno de Trump solicitó a un juez que desestime una demanda presentada por tres estados con mayoría republicana que buscaban cortar el acceso a la mifepristona, un medicamento para abortar.
La administración Trump defiende las regulaciones federales que permiten la disponibilidad de píldoras abortivas en línea y por correo, según reveló el Departamento de Justicia el lunes. Pero en lugar de defender las normas de la Administración de Alimentos y Medicamentos (FDA) sobre las píldoras basándose en el fondo, el Departamento de Justicia argumentó en un documento presentado ante un tribunal federal de Texas que los tres estados controlados por el Partido Republicano que demandan a la agencia carecen de legitimación activa y que el caso debería ser desestimado. “Los estados tienen la libertad de presentar sus demandas en un distrito donde la jurisdicción sea la adecuada, pero las demandas de los estados ante este tribunal deben ser desestimadas o transferidas de conformidad con el mandato obligatorio del estatuto de jurisdicción”, escribieron los abogados del gobierno federal.
La demanda de Idaho, Kansas y Missouri argumenta que la Administración de Alimentos y Medicamentos (FDA) debería restringir el acceso a la mifepristona. Presentaron su demanda después de que la Corte Suprema preservara el acceso a la mifepristona el año pasado. Quieren que la FDA prohíba las recetas de mifepristona por telesalud, exija tres visitas al consultorio y restrinja el momento del embarazo en el que se puede utilizar.
¿Esto es una victoria para el acceso al aborto?
A primera vista, podría parecer una victoria para el acceso al aborto, pero a los expertos les preocupa que, en realidad, la medida preserve la capacidad del gobierno para mostrarse evasivo ante cualquier plan futuro para atacar el derecho al aborto.
Cuando Donald Trump regresó a la Casa Blanca a principios de este año, los activistas antiaborto estadounidenses depositaron grandes esperanzas en el hombre que ayudó a orquestar la caída del caso Roe contra Wade. Pensaron que podría usar una ley antivicio del siglo XIX para prohibir el aborto en todo el país. De no lograrlo, imaginaron que podría usar el poder de la Administración de Alimentos y Medicamentos (FDA) para restringir el acceso a la mifepristona o incluso retirarla del mercado por completo.
Trump sobre la píldora Mifepristona
El presidente Donald Trump afirmó repetidamente durante la campaña electoral de 2024 que no tomaría ninguna medida federal para limitar la disponibilidad de píldoras para abortar, argumentando que el asunto debería quedar en manos de los estados. Esta postura ha indignado a los grupos antiaborto que apoyaron la reelección de Trump, quienes se han comprometido a seguir impulsando restricciones federales sobre la mifepristona, un fármaco utilizado en aproximadamente dos tercios de todos los abortos, informa Politico.
La nueva demanda presentada por Trump sobre la regulación de la mifepristona indica un patrón emergente en la estrategia legal de su administración, tras la decisión del Departamento de Justicia a principios de este año de defender una disposición fundamental de la Ley de Cuidado de Salud Asequible. Las posturas de la administración en ambos casos sorprendieron a muchos al respaldar políticas favorecidas por los demócratas, pero en esencia buscan preservar el poder ejecutivo e impedir que los tribunales cuestionen las decisiones de las agencias.
La postura del gobierno en este caso, que considera a los estados incompetentes, también se produce en un momento en que la administración está defendiendo las impugnaciones de California y otros estados liderados por los demócratas, y podría sentar un precedente beneficioso en esas demandas.