Mira la misa de Domingo de Ramos del Papa Francisco y su mensaje: Video

Mensaje del Papa Francisco en misa de Domingo de Ramos: Semana Santa

Getty Images Mensaje del Papa Francisco en misa de Domingo de Ramos hacia la unidad

Este domingo 28 de marzo se dio inicio oficial a la Semana Santa 2021, y fue el Papa Francisco el encargado de abrir las celebraciones religiosas de una de las fiestas más representativas del mundo católico, con la popular misa de Domingo de Ramos desde El Vaticano.

El Sumo Pontífice ofició el servicio religioso a las 10:30 de la mañana hora de Roma, 5:30 hora este de Estados Unidos, con una eucaristía que fue transmitida a través de internet y cadenas radiales a millones de fieles alrededor de todo el mundo.

En la misa, la cual puedes ver en el siguiente link que compartimos en este arículo, el Papa Francisco reconoció las dificultades que el mundo todavía enfrenta tras más de un año de haber sido golpeados por la pandemia del COVID-19.

“Hemos entrado en la Semana Santa. Por segunda vez la vivimos en el contexto de la pandemia. El año pasado estábamos más conmocionados, este año estamos más probados. Y la crisis económica se ha hecho más pesada”, comentó Francisco, quien hizo una pequeña procesión con ramos en el templo, acompañado por varios sacerdotes y obispos, quienes portaban sus tapabocas. En la iglesia había solamente un pequeño grupo de asistentes siguiendo las normas de distanciamiento social.

El máximo jefe de la Iglesia Católico pronunció su homilía recordando los sentimientos que genera la Semana Santa, y luego hizo un llamado a la urgencia de que en estos momentos en que los países siguen luchando contra el coronavirus con programas de vacunación, se promueva la unión y la ayuda a los demás.

“En esta liturgia pasamos de la alegría que supone acoger a Jesús, quien entra a Jerusalen, al dolor de verlo condenado a muerte, crucificado… entramos entonces en este estupor”, dijo el Papa. “Permanezcamos unidos. Hagamos sentir nuestra cercanía a las personas más solitarias y probadas. Nuestra cercanía a los médicos, al personal sanitario, a las enfermeras, a los voluntarios… Nuestra cercanía a las autoridades, que deben tomar medidas duras, pero por nuestro propio bien. Nuestra cercanía a los policías, a los soldados que en la carretera siempre están tratando de mantener el orden, para que se cumplan las cosas que el gobierno pide que se hagan por el bien de todos nosotros. Proximidad a todo”, destacó el periódico El Tiempo.

“(La pandemia es) una situación histórica y social que conlleva problemas de carácter “físico, psicológico y sobre todo espiritual, que siembran desconfianza y desesperación (…) Y, a lo largo del viacrucis cotidiano, nos encontramos con los rostros de tantos hermanos y hermanas en dificultad: no pasemos de largo, dejemos que nuestro corazón se mueva a compasión y acerquémonos”, insistió el Papa Francisco en la misa de Domingo de Ramos. “Nos preguntamos por qué yo, pero después comprenderemos el don que se nos ha concedido”.

El Papa Francisco también destacó que Jesús dio la vida por todos en la cruz, en un acto de amor y que esa debe ser una muestra que jamás, especialmente en los momentos mas difíciles, se debe de olvidar, entendiendo que Él es compañía para todos y que el amor es el mayor sentimiento que existe.

“Ahora sabemos que no estamos solos. Dios está con nostros, en cada herida, en cada miedo. Ningún mal, ningún pecado tiene la última palabra. Dios vence, pero la palma de la victoria pasa por el madero de la cruz”, dijo el Papa argentino, de 84 años.

“Pidamos la gracia del estupor. La vida cristiana sin asombro, es monótona. Cómo se puede testimoniar la alegría de haber encontado a Jesús, si no nos dejamos sorprender cada día con su amor admirable que nos perdona”, agregó Francisco, quien pidió de paso no quedarse en el encierro del dolor y las frustraciones.

“Hemos perdido la capacidad de asombrarnos hacia Dios, tal vez porque nuestra fe ha sido corroida por la costumbre o tal vez porque permanecemos encerrados en nuestros remordimientos y nos dejamos paralizar por nuestras frustraciones. Tal vez, porque hemos perdido la confianza en todo y nos creemos incluso fracasados…
La grandeza de la vida es justamente la belleza del amor”, advirtió Francisco en la solemne misa, que duró más de 1 hora y media, donde condenó el atentando en Indonesia de esta mañana frente a la catedral de Makassar, que dejó al menos 14 heridos.

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