Guatemalteca detenida junto a su recién nacida estadounidense será deportada

Getty

Una ciudadana migrante guatemalteca de 24 años de edad, y en estado de embarazo fue detenida el pasado 28 de abril por agentes fronterizos de Arizona en el desierto de Sonora, y poco después dio a luz a su bebé ciudadano estadounidense, lo que no le significó una excepción en su orden de deportación, así lo informó Telemundo.

La mujer identificada solo como Erika y con ocho meses de embarazo fue detenida por las autoridades del Servicio de Inmigración y Control de Aduanas de Estados Unidos tras vagar durante dos días por el caluroso desierto, lo que hizo que su trabajo de parto se adelantara.

Bajo la supervisión de los agentes del Departamento de Seguridad Nacional (DHS, por sus siglas en inglés), la mujer fue trasladada al Centro Médico de Tucson en donde dio a luz bajo supervisión policial, fue dada de alta el sábado y entregada en custodia a una organización sin fines de lucro en Phoenix.

La mujer ahora espera una audiencia ante un juez para definir su situación.

Luis Campos, abogado asignado a la joven madre guatemalteca, manifestó que no había podido hablar con su clienta durante días, y que le negaron la visita al hospital de Tucson, lo que le para el constituye una violación a su derecho de defensa contenida en la Quinta Enmienda de la constitución nacional.

Campos añadió que tampoco le permitieron obtener su firma en un formulario G-28, que se utiliza para notificar a las autoridades migratorias cuando un abogado representa a un cliente en un caso de inmigración. “No hubo respeto por el debido proceso”, dijo según declaraciones citadas por CNN.

En respuesta a la queja de la defensa, la Oficina de Aduanas y Protección Fronteriza de Estados Unidos (CBP, por sus siglas en inglés) emitió un comunicado en el que explicó que la ciudadana guatemalteca como una persona carente de documentos legales para estar en los Estados Unidos “no tenía derecho legal a un abogado durante los procedimientos de inmigración”.

Gobernadora de Arizona intercede en el caso

De acuerdo con el medio Debate, el caso de Erika llegó hasta la gobernadora de Arizona, Katie Hobbs, quien decidió intervenir a su favor ordenando a su equipo de trabajo contactarse con las autoridades federales y locales, para evitar la deportación express de la ciudadana y su bebe en lo que ella considero como un caso inhumano de las leyes migratorias de la actual administración.

La funcionaria solicitó hacer seguimiento al caso y procurar por la integridad y bienestar tanto de la madre como del hijo.

“Se reporta que la gobernadora Katie Hobbs va a intervenir para que Erika pueda comenzar con el proceso de deportación estándar. Ahora la guatemalteca tiene la oportunidad de apelar esa decisión y solicitar asilo en los Estados Unidos, un derecho legal para cualquier inmigrante indocumentado en Arizona”, informó La Nación.

En apoyo al proceder de la gobernadora Katie Hobbs, la fiscal del condado Pima, Laura Conoever dijo que esta es precisamente la clase de circunstancias para las que se crean las excepciones humanitarias a la ley”, y que agradecía al personal del Centro Médico de Tucson y a la comunidad por demostrar una vez más la compasión que caracteriza a Tucson”.

Por su parte, Campos dijo que durante tres días la situación de Erika fue incierta pero que gracias a la presión de muchas personas y por la exposición del caso en los distintos medios de comunicación las cosas habían cambiado para Erika y su bebé.

“Hemos visto que este gobierno ha mostrado menos interés en los asuntos humanitarios, pero con la presión de la comunidad, incluyendo declaraciones de la alcaldesa de Tucson y la fiscal del condado, y artículos de la prensa, hemos logrado convencer a las autoridades para que la liberen”, declaró el abogado según a Univision.

LEER MÁS: Migrante prende fuego a mujer en el metro de Nueva York