
La Casa Blanca retiró este jueves 13 de marzo la nominación de David Weldon para director de los CDC bajo la presidencia de Trump, según informa Axios. Trump había elegido a Weldon, de 71 años, para dirigir los Centros para el Control y la Prevención de Enfermedades (CDC, por sus siglas en inglés).
Robert F. Kennedy, quien dirige el Departamento de Salud y Servicios Humanos, afirmó que Weldon no estaba preparado para el cargo, según informó Axios. CNN informa que las opiniones de Weldon coinciden estrechamente con las Kennedy, un conocido escéptico de las vacunas. Weldon ha cuestionado durante mucho tiempo la seguridad de ciertas vacunas, promoviendo la falsa afirmación que las vincula con el autismo. En 2006, Weldon compareció con padres que afirmaron que los CDC habían encubierto pruebas que vinculaban las vacunas con el desarrollo de autismo en niños.
Según se informa, los CDC reexaminarán esa relación durante la presidencia de Kennedy, a pesar de décadas de investigación que la desmienten.
Weldon es médico internista y sirvió en el Congreso durante 14 años, de 1995 a 2009. Durante su mandato en el Congreso, Weldon patrocinó un proyecto de ley que transferiría la responsabilidad de la seguridad de las vacunas a los CDC. Afirmó que la agencia tenía un conflicto de intereses porque compra y promueve vacunas. El proyecto de ley nunca fue aprobado por los comités. Weldon es un médico de medicina interna que sirvió en el Congreso durante 14 años, de 1995 a 2009.
ABC reporta que en 2019, Weldon promovió la teoría sin fundamento de que las vacunas podrían causar autismo.
Weldon no podía estar a cargo de los CDC
La senadora demócrata Patty Murray, expresidenta del comité ante el cual Weldon iba a testificar, afirmó haber expresado su preocupación por el sentimiento antivacunas durante su reunión privada. “En nuestra reunión del mes pasado, me perturbó profundamente escuchar al Dr. Weldon repetir afirmaciones desmentidas sobre las vacunas. Es peligroso poner a cargo de los CDC a alguien que cree la mentira de que nuestro riguroso programa de vacunación infantil expone a los niños a niveles tóxicos de mercurio o causa autismo”, declaró Murray en un comunicado. “Ante uno de los peores brotes de sarampión en años, gracias al presidente Trump, un escéptico de las vacunas que pasó años difundiendo mentiras sobre vacunas seguras y probadas nunca debería haber sido considerado para dirigir la principal agencia encargada de proteger la salud pública”.