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El actor porno Ignacio Jordà González, conocido en el mundo del cine porno como Nacho Vidal (46 años), ha sido detenido esta mañana por su presunta implicación en la muerte del fotógrafo de moda José Luis Abad. Al actor se le imputa un delito de homicidio imprudente y un delito contra la salud pública, junto con otras dos personas, un familiar suyo y un empleado del hogar.
El equipo de la Policía Judicial de Játiva, después de 11 meses de investigación, descartó que se tratase de una muerte accidental. Según informa el periódico Levante – El Mercantil Valenciano, los tres imputados estaban realizando un rito para desintoxicar a la víctima, José Luis Abad, de las drogas, mediante la inhalación de un veneno obtenido del sapo bufo. Al ser administrada una dosis de este veneno, la víctima sufrió un infarto de miocardio que le provocó la muerte en unos minutos.
Según informa el atestado entregado a la jueza, José Luis Abad tuvo convulsiones y se le notaban síntomas de asfixia (se encontraba con la cara morada y totalmente rígido en el suelo).
Se trata de una muerte producida en julio de 2019 en una casa de campo que Nacho Vidal posee en Enguera (Valencia, España). Pese que a que, como comentábamos, en un primer momento su muerte fue considerada como “accidental”, finalmente el esfuerzo de la familia de la víctima valió para que se abriera una investigación más profunda.
El actor, junto con los dos otros implicados, ha quedado en libertad provisional tras prestar declaración ante la jueza de Instrucción número 2 de Xátiva (Valencia, España).
¿Qué efectos tiene el ritual del sapo bufo alvarius?
La especie Bufo Alvarius de sapo es originaria del Desierto de Sonora (México). Se trata de un anfibio semi acuático, ya que de septiembre a abril, el animal permanece bajo tierra en estado de hibernación. Las glándulas que tiene detrás de la cabeza producen secreciones que pueden provocar efectos alucinógenos. En concreto, esta especie genera una molécula, la 5-MeO-DMT, que cuando circula por los receptores de serotonina del cerebro humano, altera la conciencia, según informa El Confidencial.
Al fumar este veneno de sapo, sus efectos son inmediatos, con una duración que puede variar entre 1 o 15 minutos según la cantidad inhalada. La percepción del propio cuerpo humano varía y se puede llegar a perder el control del cuerpo durante algunos minutos.
Esta sustancia, también conocida como “La molécula de Dios”, puede llegar a provocar efectos secundarios muy amplios. Desde temas menores, como náuseas, vómitos y temblores, hasta descompensaciones psicóticas, cuadros de esquizofrenia o disfunciones en el córtex cerebral, apunta el diario El Español.
El propio Nacho Vidal contaba su experiencia con la molécula del sapo bufo alvarius en este vídeo.