Getty El papa Francisco en el Vaticano.
El papa Francisco no recibe un salario pero sí tiene acceso a los 10 mil millones del Vaticano, según Times.
Lo que tienes que saber:
1. El papa Francisco no recibe un salario
GettyPapa Francisco
El papa Francisco es el líder de una de las organizaciones más grandes de la Tierra. Él tiene sus deberes como los de un presidente de una compañia: toma decisiones, tiene citas, administrar y más. Pero al papa no se le paga por su servicio.
Usualmente un presidente tiene un salario millonario, mientras el papa Francisco no tiene un salario. Tradicionalmente, los Papas ganan 3 monedas por año: una de oro, una de plata y una de cobre. Después de su muerte, 3 bolsas se colocan en sus ataúdes que contienen las monedas que acumularon durante su servicio, según informa Legatus.org.
El Papa no tiene un salario, y si necesita algo la administración del Vaticano se lo proporciona, no importa lo que sea siempre y cuando sea para su uso personal, desde una pasta dental, hasta la renta de cualquier auto, casa, hotel, etc. Lo más caro es el transporte de su papamóvil.
De acuerdo a algunos cálculos se dice que gasta alrededor de $33,000 dólares al año en el transporte del Papamóvil. Se tiene que pagar por el transporte del auto, el mantenimiento, el chofer, etc.
2. El papa Francisco tiene acceso a los miles de millones del Vaticano
GettyPapa Francisco con el Príncipe Carlos y su esposa Camilla, el 4 de abril de 2017.
Acerca de la riqueza del Vaticano se calcula unos $10 mil millones a $15 mil millones. De esta riqueza, las acciones italianas por sí solas ascienden a $1,600 millones, el 15% del valor de las acciones cotizadas en el mercado italiano. El Vaticano tiene grandes inversiones en banca, seguros, productos químicos, acero, construcción, bienes raíces. Los dividendos ayudan a pagar los gastos y las obras de caridad del Vaticano, como ayudar a 1.5 millones de niños y proporcionar algo de comida y ropa a 7 millones de italianos necesitados. A diferencia de los accionistas ordinarios, el Vaticano no paga impuestos sobre este ingreso, según Times.
3. Cuando fue elegido como el representante de la iglesia católica renunció a varios lujos
Papa Francisco
Cuando fue elegido, Jorge Mario Bergoglio, el nombre de pila del papa, dijo en su discurso central: “desearía una Iglesia pobre y para los pobres”.
Luego renunció al lujoso coche oficial y a parte de la escolta, ha sustituyó el papamóvil blindado por un jeep descubierto para recorrer la plaza de San Pedro.
El País informa que el pontífice suele invitar a sus misas diarias de las siete de la mañana a los trabajadores del Vaticano.
Además renunció al lujoso apartamento pontificio del tercer piso del Palacio Apostólico. El papa prefirió la pequeña habitación 201 de la residencia de Santa Marta. “Vivo en la Casa de Santa Marta y no en el Palacio Apostólico porque me gusta estar entre la gente. No puedo estar solo”, reportó Univision.
4. Lamborghini del papa Francisco fue subastado por $854 mil de dólares
Papa Francisco
En el 2017, el papa Francisco recibió por parte de Stefano Domenicali, CEO de la compañía italiana Lamborghini, un lujoso auto blanco. El Pontífice recibió un regalo que muchos desearían tener en casa: un Lamborghini Huracán RWD personalizado.
Nunca intentó conducirlo por las calles del Vaticano y decidió contactar con RM Sotheby’s y subastar el superdeportivo. El dinero obtenido en el evento fue destinado a tres proyectos benéficos distintos alrededor del mundo.
El Lamborghini Huracán RWD del papa Francisco estaba equipado de un motor V10 de 580 caballos de potencia y una carrocería única en color ‘Bianco Monocerus’ y líneas ‘Giallo Tiberino’ con detalles inspirados en la bandera del Vaticano.
El precio estimado de la subasta rondaba entre los $300 mil dólares y los $415 mil dólares, finalmente el Lamborghini Huracán de Francisco alcanzó la suma de $854 mil dólares en el evento. Lo cual se convirtió en récord, reportó El Comercio.
5. Los padres del papa Francisco eran unos modestos trabajadores italianos
Papa Francisco
Jorge Mario Beroglio nació el 17 de diciembre de 1936 en Buenos Aires, Argentina. Él viene de una modesta familia de emigrantes italianos, sus padres Mario Bergoglio, un empleado de los ferrocarriles, y Regina, una ama de casa. Después de graduarse como técnico químico, a los 21 años sintió el llamado de la vocación religiosa y entró en el seminario jesuita de Villa Devoto – en ciudad de Buenos Aires, del cual se graduaría sacerdote en 1969.
El papa Francisco había sido maestro en escuelas que la Compañía de Jesús tenía en Santa Fe y Buenos Aires. Su brillante trayectoria presbiteriana, circunscripta a la Compañía de Jesús, lo convirtió en un provincial argentino de la misma (1973-1979), durante los tiempos duros y violentos de la dictadura militar.
En 1992, fue consagrado obispo titular de Auca, cargo que lo convirtió en uno de los cuatro prelados auxiliares de Buenos Aires. Más tarde fue nombrado obispo coadjutor de esta arquidiócesis, cuyo liderazgo asumió como arzobispo en 1998.
El Papa Juan Pablo II lo nombró cardenal con el título de San Roberto Belarmino en 2001, una magistratura que era igual a la máxima autoridad de la Iglesia Católica en su país. También fue presidente de la Conferencia Episcopal Argentina y del Consejo Episcopal Latinoamericano (CELAM).
Tras la renuncia de Benedicto XVI en 2013 fue el evento que posibilitó la ascensión del cardenal argentino a un nuevo Papa. El papa Francisco fue elegido el 13 de marzo del mismo año.