La Voz 2020 – Telemundo: ¿Quiénes son los concursantes?

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Telemundo

Las audiciones a ciegas de la segunda temporada de La Voz de Telemundo han llegado a su fin con la transmisión de este domingo 01 de marzo. Los jueces, Carlos Vives, Alejandra Guzmán, Luis Fonsi y Wisin lograron completar sus equipos oficiales y próximamente darán inicio al duelo de batallas de talentos para iniciar formalmente la búsqueda del ganador de esta nueva temporada del reality show.

Durante esta nueva etapa de la exitosa competencia musical, los coaches comienzan a desarrollar sus respectivos equipos con la ayuda de otras estrellas musicales como lo son Jesse & Joy, Sebastián Yatra, Karol G y Mario Domm que servirán como mentores de los participantes de esta segunda temporada de “La Voz”.

Te  presentamos a los equipos oficiales de Vives, Guzmán, Fonsi y Wisin:

Team Luis Fonsi

  • Adrián Torres, 19 años, Texas

Adrián Torres está de regreso en “La Voz” para demostrar que la perseverancia es muy importante para alcanzar los sueños. Es originario de México y vive con su papá, quien le enseñó el arte del mariachi, una tradición de cinco generaciones en su familia. A los 14 años, unos ladrones entraron a su casa a robar y le prendieron fuego, por lo que su familia lo perdió todo. Aunque con el dinero ahorrado y un terreno que tenía en México su papá logró sacarlos adelante, Adrián pasaba mucho tiempo en la calle. Sin embargo, con el nacimiento de su hermano, recapacitó y se alejó de esa vida, principalmente porque quiere ser buen ejemplo para él. Actualmente, trabaja con su hermano y su papá en una empresa que crearon y que se dedica a la reparación de casas.

 

  • Emily Piriz, 23 años, Florida

A tan sólo unos días de cumplir 24 años, Emily Piriz, se presentó en las audiciones a ciegas de “La Voz US” en busca de conseguir un lugar y finalmente lo consiguió en el equipo de Luis Fonsi. Ella porta con orgullo sus raíces cubanas y siente orgullo de ser hispano-americana, por lo que canta en español y en inglés. Viene de una familia numerosa y muy unida, por lo que sus padres siempre la han apoyado en su sueño de triunfar en la música. De niña le regalaron un piano y la apoyaron cuando se presentaba en eventos y restaurantes. Un concurso le dio la oportunidad de tocar en México y Las Vegas y más adelante formó una banda, con la que visitó otras ciudades. Sin embargo, el proyecto no funcionó como quería y lo dejó. Un poco decepcionada por no conseguir el éxito deseado, cambió los escenarios por las aulas y comenzó a dar clases de teatro musical y ópera. Además, trabaja como camarera en un bar.

 

  • Arturo Guerrero, 34 años, Texas

Arturo Guerrero estaba decidido a dedicarse a la música desde muy pequeño, con tan sólo cinco años de edad no perdía la oportunidad y cantaba en todas las fiestas a las que acudía con sus padres y hermanas. Por ello se hizo fama de buen cantante y a los 12 años lo invitaron a amenizar una fiesta muy importante en El Paso. Tiene mucha experiencia en la industria, pues se ha presentado a numerosas audiciones, concursos y ha cantado con algunas bandas. Además, eso lo ha llevado a aprender distintos géneros como salsa, merengue, balada, bolero y cumbia. A sus 23 años retomó la música que más le gusta, la regional mexicana, y ganó el primer puesto en el Festival del Mariachi de El Paso, Texas. Se apoya en sus padres, sus hermanas y su esposa y gracias a su familia es que continúa persiguiendo su sueño.

  • Joselyn Alarcon, 19 años, Colorado

Joselyn Alarcon canta desde que tenía siete años de edad. Su maestra de primaria se convirtió en su mentora durante esos años y le ayudó a aprender a leer y escribir música. Se hicieron tan unidas, que hasta la fecha le brinda su apoyo. Ya en la secundaria se unió al coro de honor, con el que tuvo la oportunidad de participar en competencias. Además, empezó a cantar en eventos. Aunque su familia no tenía dinero para pagarle clases, ella fue autodidacta y también aprendió a tocar guitarra. Es de origen mexicano y su mayor aspiración es pertenecer al programa DACA, pero ese sueño se ha complicado mucho con la administración del presidente Trump, quien quiere terminar con éste. Sus padres han pagado mucho dinero por el programa y éste le permite a Joselyn viajar, estudiar y cantar.

  • Rubi Monge, 20 años, Florida

Desde los 3 años inició la conección de Rubi Monge con la música y a los 7 años ya sabía que el canto y la composición eran su destino. Todos en su casa son músicos, por lo que lo lleva en la sangre. Su mamá canta, escribe canciones y toca la guitarra, mientras que sus hermanos son productores musicales. A los 6 años llegó con su familia al sur de la Florida y por el trabajo de sus padres, ella estaba mucho tiempo sola en casa, fue ahí cuando se refugió en la música. Canta desde los 11 años en el coro de la iglesia en la que sus padres fueron pastores. Actualmente trabaja como recepcionista en un laboratorio de radiología y además imparte clases de canto y composición musical a niños, a quienes les enseña el efecto de la música para sanar.

  • Vanessa Envee Echavarria, 42 años, Florida

Vanessa “Envee” Echavarria comenzó a cantar prácticamente desde el momento en el que aprendió a hablar, pues desde los 2 años su padre le comenzó a enseñar. A nivel profesional lo hace desde los 15 y desde hace 7 se dedica únicamente a este negocio y todos sus ingresos dependen de ello. Su padre era cantante, pero cuando se mudaron desde Cuba, tuvo que dejar de hacerlo para mantener a su familia y por ello es la más grande inspiración de Vanessa. A los 18 años se mudó a New York para estudiar música, pero al poco tiempo se quedó sin casa y tuvo que vivir en el subway, a pesar de tener la opción de regresar a casa de sus padres, estaba determinada a triunfar. Estuvo un tiempo luchando por sobresalir en el mundo del espectáculo, pero tuvo que regresar a Miami para cuidar a su padre enfermo, quien falleció un año después. Actualmente trabaja como cantante en un hotel, así como en diferentes casinos y cabarets.

  • Alejandra Mor, 31 años, Florida

Alejandra Mor gusta del canto desde que tenía 4 años. Recuerda que desde su infancia le gustaba reunir a toda su familia para cantarles. La música le permitió sentirse parte de la familia, pues era el momento en el que lograba tener la atención de todos. Ella recuerda su infancia como algo disfuncional, con varios conflictos y eso afectó su autoestima. Ella imaginaba que si no la escuchaban era porque no la querían. A los 12 años emigró a Miami junto con sus padres. Al principio le resultó muy complicado adaptarse y separarse de sus raíces y amigos. Sin embargo, con el tiempo Alejandra aprendió a enfrentar sus miedos y a encarar la vida con mayor valentía. Ella sostiene que quererse a uno mismo es la clave de la felicidad y que la confianza en uno mismo puede hacer que consigas lo que deseas.

  • Brian Cruz, 19 años, Florida

Brian Cruz nació en Cuba y vivió en la isla hasta sus primeros años de pubertad, hasta que a los 13 años se mudó con su familia a Estados Unidos, algo que fue difícil para él, ya que tuvo que dejar a sus amigos. No obstante, él reconoce que esa mudanza lo convirtió en el muchacho disciplinado que es hoy. La música es central en su casa y todos saben tocar piano, guitarra y además cantan. No obstante, él nunca tomó clases y aprendió por su cuenta cuando su madre le regaló una guitarra. Compone sus propias canciones y aunque las letras se le dan bastante bien, la cuestión de la instrumentación no tanto. Es por ello que quiere estudiar ingeniería de sonido. Además, le gusta ir al gym, jugar baseball y cocinar.

  • Michelle Rivera, 22 años, Florida

Michelle Rivera comenzó su incursión en la música a los 8 años, cuando comenzó a tomar clases de piano con su hermano gemelo, Sammy Jr. Sin embargo, se aburrió pronto de la música clásica y comenzó a cantar. A los 15 compuso sus primeras canciones. Se mudó a New York para estudiar psicología, pero ya allá no le gustó mucho lo que aprendía, por lo que se puso triste y dejó de componer, tocar y cantar. Posteriormente regresó a casa de sus padres y con su apoyo retomó su carrera musical. Metió su aplicación para ingresar a Berklee y está muy entusiasmada pues logrará cumplir el sueño de su madre, quien quería estudiar música, pero sus abuelos no se lo permitieron. Desde su ingreso a la universidad comenzaron los ensayos, las presentaciones y el público. Ella siempre se presenta como compositora, pues no se siente cómoda al presentarse como cantante, aunque le gusta mucho y siempre quiere repetir en cuanto se baja del escenario. Además de estudiar en Berklee, también trabaja ahí.

  • Diana Puentes, 26 años, México

Diana Puentes comenzó a cantar como hobby cuando era niña, hasta que su maestro Alfredo Gallegos detectó su potencial y le dio oportunidad de cantar en la escuela y se convirtió en su mentor. A sus padres también les gustó la idea, por lo que le buscaron clases para que perfeccionara su habilidad. Un día fue a una Charrería y quedó impresionada con la forma en que cantaba el charro y cómo hacía que bailara el caballo, por lo que le pidió a sus padres que le consiguieran un maestro de ese estilo musical. Sin embargo, con el divorcio de sus padres todo cambió, ella se sentía muy insegura y a sus 12 años dejó la música. La gente le aconsejaba que eligiera algo “seguro” para estudiar, por lo que decidió estudiar Ingeniería en Administración de Empresas y dejó la música en el pasado. Sin embargo, para pagar sus estudios Diana recurrió a lo único que sabía hacer: cantar. Por ello, regresó a los escenarios y aunque ya se graduó, sigue viviendo de la música sin que ella lo planeara.

  • Isai Reyes

Muy pronto esta noticia será actualizada con más información de este participante.

Team Alejandra Guzmán

  • Sugeily Cardona, 27 años, Puerto Rico

Sugeily Cardona ama cantar desde que tenía 6 años, aunque en principio tuvo problemas debido a su timidez, por lo que no se sentía con la confianza para desenvolverse. A pesar de que tomó lecciones de piano, aún no confiaba en su voz, pero sabía que la música era su futuro. Comenzó a tomar clases de música formalmente en la universidad y ahora da clases la academia de música en Puerto Rico. Su infancia fue muy dura debido a un problema en la cadera, que le fue detectado cuando solamente tenía 14 meses de edad y la llevó a someterse a 11 cirugías antes de terminar la primaria. A sus 23 años tuvo otro momento difícil, pues se colocó una prótesis de cadera que casi la deja en silla de ruedas. La música y su fe en Dios le permitieron superar todos esos obstáculos y con su ingreso a “La Voz” busca por fin alcanzar su sueño.

  • Steven Sibaja, 30 años, Costa Rica

La infancia de Steven Sibaja fue complicada, pues los niños de su escuela se burlaban de él por ser muy blanco y un poco gordito. Además, su padre lo presionaba para convertirse en futbolista, deporte que no le gustaba. Eso lo llevó a ser introvertido y encerrarse en su cuarto, donde desarrolló su gusto por la música. La música además le permitió librarse de un camino equivocado, ya que muchos de sus amigos de la época están en centros de rehabilitación o en viven en las calles. Sus inicios en el canto fue con el coro de la iglesia y posteriormente estudió durante tres años. Finalmente, se decidió por estudiar una ingeniería, pero nunca dejó de soñar con triunfar en la música. Tiene experiencia en este tipo de certámenes, pues el año pasado participó en “La Voz México” y aunque no ganó la contienda, su participación le permitió abrir su academia de música.

  • José Class, 28 años, Florida

José Class es otro de los participantes que se presentó a las audiciones a ciegas en la primera temporada y tras no tener éxito regresó con se de revancha. Fue muy difícil para él superarlo, pero las palabras de Alejandra Guzmán y Luis Fonsi le dieron la fuerza para regresar este año. Trabaja en un call center y eso ha provocado que no pueda enfocarse como quisiera en la música, pues pasa el día escuchando quejas y llega a su casa está agotado. No obstante, ensaya en su auto, armoniza con otros cantantes y graba covers en su propio estudio casero, que luego publica en sus redes sociales.

  • Velaviee, 24 años, Florida

Victoria “Velaviee” Velazco proviene de una familia que ha sido exitosa en el mundo de la música. Su hermano René fue integrante de una agrupación infantil de salsa llamada Salserín, su hermana es supra sopran, aunque no eligió la música como su profesión. Sin embargo, Victoria no heredó el talento de sus hermanos, pero sí tenía mucho carisma. Ella en realidad tenía mucho en común con su abuelo, quien era apasionado de la música, pero nunca tuvo ritmo. Él le regaló un cuatro y ella tomó clases durante tres años, en su cumpleaños ella le cantaba “Mi viejo” de Pero y a él se le llenaban los ojos de lágrimas. Victoria vivió en carne propia la represión del gobierno de Chávez en Venezuela, por lo que su abuelo juntó sus ahorros y le compró un boleto para que regresara a Estados Unidos, donde ella nació. Cuando llegó rento una habitación, hasta que un día volvió y encontró sus maletas afuera, pues le habían rentado la casa a otra familia. Ganaba solamente $150 dólares a la semana, por lo que le costó mucho trabajo salir adelante. Hoy trabaja en una non profit y tiene más estabilidad.

  • Hilda Naranjo, 32 años, Florida

Hilda Naranjo creció rodeada de músicos que tocaban la guitarra y cantaban de forma empírica. Vive con su madre, su padrastro, a quien quiere como a su padre, y con su bebé de seis meses de edad. Llegó a los Estados Unidos hace cuatro años, después de que salió de Cuba con una agrupación rumbo a Italia, para una gira. Su esposo aún reside en Cuba y ella lo visita cuando tiene tiempo libre y dinero. Sin embargo, eso no ha pasado muy seguido y no ha podido abrazar a su hija. Añora interpretar salsa, merengue, son cubano, boleros y baladas, pero la falta de tiempo y recursos económicos se lo han imposibilitado. Cantaba desde muy pequeña con su hermano, a quien corregía ya que no le salía muy bien la voz.

  • Eliana Sasics, 48 años, New York

Eliana Sasics es hija de una indígena colombo panameña y de un médico húngaro. Ella se dedicaba a lavar platos en un restaurante de Medellín, mientras estaba embarazada de siete meses. Antes de empezar cantaba junto con el guitarrista del lugar, cuando aún no llegaban los clientes. Su jefe decidió probar algo distinto y la puso en el escenario y fue tal el éxito que la contrató como cantante. Ahí empezó su recorrido en géneros como el jazz, tango, trova cubana, flamenco, música brasileña y aprendió a cantar en varios idiomas como inglés, italiano, francés y hasta coros africanos. En 2003 viajó a los Estados Unidos con una visa de artista junto a una agrupación de salsa, con la que logró tocar en Miami. También actuó en shows de televisión por una larga temporada y tiene una trayectoria de 30 años en el negocio de la música. Aunque se mudó a New York, la gran competencia y su edad no le han ayudado a sobresalir como ella quisiera.

  • María Cristina Bravo, 21 años, Texas

María Cristina Bravo proviene de una numerosa familia de 11 hermanos, el más chico de 3 años y el más grande de 25. Su padre es dueño de una pista de boxeo, por lo que le enseñó a pelear desde que era una niña para que pudiera defenderse. Sin embargo, descubrió que era muy buena y es una de sus pasiones. Hasta el momento lleva cinco peleas y todas las ha ganado. Sin embargo, el canto es otra de sus grandes pasiones y también participó en una competencia de canto. No obstante, no pudo ganar y tuvo una depresión muy severa, lo que la llevó a negarse a cantar nuevamente. Sin embargo, tras un accidente automovilístico en el que uno de sus hermanos cayó en coma y ella le cantó. Finalmente, el joven se recuperó y le dijo que peleó por su vida por ella y le rogó que volviera a cantar de nuevo. Por lo que quiere ganar “La Voz” para demostrarle a su hermano que la música puede curar cualquier herida.

  • Alexandra Carro-Pergola, 25 años, Puerto Rico

Alexandra Carro-Pergola tiene como ejemplo de vida a su madre, quien de joven cantaba con un grupo y que además de ser su inspiración es su heroína. Ha vivido siempre con ella y su padrastro, a quien considera su verdadero padre. Ella comenzó a cantar desde pequeña, pero en cuanto es convirtió en adulta dejó de hacerlo, pues sentía que era un sueño en el que no debería enfocarse. En esa época ocupaba todo su tiempo en dos trabajos y en su novio, a quien no le gustaba que ella cantase y se alejó aún más de ese sueño. Esto fue así durante 5 años, hasta que un día en una boda familiar volvió a hacerlo y sintió como si su alma se aliviara. Eso la animó a tomar clases de música por primera vez y ahora canta en todos lados.

  • Julio Cesar Castillo, 28 años, Illinois

Julio Cesar Castillo canta desde que tenía 3 años. No hay otros músicos profesionales en su familia, aunque su padre y sus abuelos cantaban en las reuniones familiares. A sus 14 años, aprendió a tocar la guitarra a través de tutoriales en YouTube. Comenzó a trabajar como mariachi los fines de semana y así obtuvo sus primeros ingresos. Su familia siempre lo apoyaba y ocasionalmente iban a verlo tocar. Sin embargo, la vida le cambió drásticamente tras un grave accidente automovilístico que casi les cuesta la vida a él y a su padre. Tras el incidente le retiraron la licencia de conducir a su padre, por lo que Julio tuvo que trabajar más para mantener a su familia. Afortunadamente, pudo hacerlo trabajando más horas como mariachi y ha podido vivir de la música. Además, también escribe canciones pop y baladas. Su esposa también es un gran apoyo y fue quien lo impulsó a audicionar en “La Voz US”.

  • Ninfa Molina, 40 años, New York

Ninfa Molina comenzó a cantar desde los 9 años en su escuela. Recuerda que una vez en un show de payasos pidieron a un voluntario y ella subió al escenario, su canto sorprendió a todos los presentes, incluidos su padre y ella misma. Intentó dedicarse a la música en varias ocasiones, tanto como solista como en un dueto, pero en ambos casos las cosas no funcionaron. En 2012 su vida se tornó muy complicada, pues perdió todo a causa del huracán Sandy. A raíz de eso puso pausa a su carrera musical para sacar adelante a su familia. Hoy trabaja como gerente en una fábrica dental y además se dedica al arte del maquillaje profesional.

  • José Palacio, 33 años, New York

José Palacio se refugió en la música durante su etapa escolar, pues era acosado de forma terrible a causa de su sobrepeso. Llegó al punto de no querer ir a la escuela porque en ocasiones toda la clase se burlaba de él. Esta seguro de haber heredado su amor por los escenarios y el canto de su bisabuela, quien era vedette y cantante. Además, en la familia de su padre, hay varios cantantes reconocidos de merengue dominicano. Ha formado parte de bandas de salsa y de otros géneros. Actualmente trabaja como cantante en un club en New York, bailarín de belly dance, payaso y dando terapia musical a personas de la tercera edad. Es la segunda ocasión que audiciona para “La Voz US”, pero todo cambió desde la primera ocasión, pues ahora se logró verse como siempre soñó y es feliz con su cuerpo.

    • Santiago Ramos, 36 años, Puerto Rico

Santiago Ramos tuvo contacto con la música a los 6 años, cuando su madre lo inscribió en clases de violín, pero sería hasta que entró a un coro cuando se enamoró del escenario. Apenas a los 12 años formó una banda con su hermano mayor, originalmente inició como el corista, pero sabía que tenía lo necesario para ser el vocalista principal. Con el tiempo se fue dando a conocer y a componer sus propias canciones, pero tuvo que poner un freno a su carrera, pues se convirtió en padre a los 19 años. La música no le daba los ingresos necesarios para mantener a una familia, por lo que tuvo que buscar otros ingresos. Con el nacimiento de su segunda hija, consiguió un trabajo cantando en un café y descubrió que el café le apasionaba, por lo que pidió ser entrenado como barista y ascendió poco a poco hasta convertirse en gerente. Ese trabajo le permitió no sólo darle una vida digna a su familia, sino que pudo producir algunos álbumes, pues aunque ama el trabajo en la cafetería, no olvida que su primer amor fue la música.

Team Carlos Vives

  • Jimmy Rodriguez, 29 años, California

Jimmy Rodríguez es originario de Jalisco, México y migró a Los Angeles en busca de lograr su sueño de convertirse en un músico de fama internacional. Su vida cambió a los 12 años cuando cantó por primera vez en público y posteriormente se juntó con un amigo para cantar en el transporte público y ganar un poco de dinero, para ayudar a su madre. Sin embargo, fue hasta que se mudaron a la Ciudad de México, cuando empezó más formalmente su trayectoria musical. Esto gracias a que conoció a un hombre que lo introdujo a la Salsa Orchestra, género que le gustó tanto que además de cantarlo, también lo aprendió a bailar. Al principio de su travesía por los Estados Unidos, sufrió de problemas económicos y cantaba en el muelle de Santa Mónica para que los turistas le dieran propinas, pero más tarde pudo ingresar a una agrupación de Salsa Orchestra. Uno de los momentos más difíciles de su vida fue el divorcio de sus padres, particularmente por no tener la presencia de su papá.

  • Lizette Rubio, 33 años, California

Lizette Rubio lleva la música en las venas, pues su padre formó parte de una agrupación llamada Los Bárbaros de Santa Bárbara y actualmente trabaja como compositor para artistas de su localidad. Además, tiene un estudio de grabación, al que Lizette iba desde niña y en el que pudo hacer grabaciones profesionales desde muy joven. Sin embargo, no ha tenido la suerte que quisiera en su carrera. A sus 18 años compuso varias canciones con su padre y aunque firmó contrato con un productor, el material nunca vio la luz. Lo peor es que tenía contrato por 7 años con la disquera, por lo que además no podía buscar otro lugar donde lanzar su material y su carrera quedó estancada. Ella cantaba en inglés, pero su abuelita le recomendó cantar en español, al estilo de Juan Gabriel o Joan Sebastian y tras su fallecimiento, ella comenzó a cantar en su idioma natal y además se tatuó su nombre en la muñeca. Actualmente toca en un trío en fiestas, bodas y colegios, además de ser administradora de una escuela. Ella buscaba desde el principio integrarse al Team Vives, pues su amiga Kendra, quien murió el año pasado, admiraba mucho al cantante.

  • Oriana Lucas, 28 años, Florida

Oriana Lucas es la única mujer de cinco hermanos y por ello desarrolló una intuición masculina. Está acostumbrada a la gente, pues su casa era la casa del pueblo y siempre estaba llena. Su mamá era pianista y cantante, por lo que desde niña ella aprendió piano, guitarra y canto. Su primera vez como cantante profesional fue en una audición para una agrupación en Venezuela y logró quedarse. Con esa agrupación logró participar en un tour con Camila y Stopa. Cuando estuvo ante 10 mil personas creyó que no le saldría la voz, pero comenzó y fue hermoso, salió llorando de la emoción. Hace siete años abrió una tienda de bikines en línea y eso le ha dado el sustento necesario para continuar con su carrera musical desde que se mudó a Estados Unidos, cinco años atrás. Obtuvo un degree de vocalista en Los Angeles, además compone y escribe sus propias canciones.

  • Tiffany Galaviz, 18 años, California

Tiffany Galaviz heredó el sabor mexicano de su madre y la alegría puertorriqueña de su padre. Es la única de su familia que se dedica a la música, todo comenzó cuando tenía cuatro años. Su mamá veía que era muy activa y decidió encausar esa energía en algo positivo y la inscribió en una escuela de música. A los siete años se integró a un grupo de mariachi y comenzó a tomar clases de canto. Aunque su padre no está muy de acuerdo con que haga carrera en la música, eso no la detiene. Participó en “La Voz Kids” y asegura que fue una experiencia maravillosa. Es muy aplicada en sus estudios y tiene un grupo de pop con compañeros de su escuela. Sus fines de semana están ocupados por su trabajo en el mariachi y sus clases de canto.

  • Sammy Colón, 32 años, Florida

Sammy Colón inició en el mundo de la música a los 5 años, cuando tocaba los bongos mientras su madre cantaba y bailaba rumba en su natal Puerto Rico. Sammy además siguió los pasos de su madre y comenzó a cantar bachata y salsa, en pubs, fiestas de quinceaños y otros eventos. En 2014 intentó grabar un álbum y conoció a quien se convertiría en su esposa. Ella quedó embarazada al poco tiempo de casarse, pero una complicación en el parto provocó que el niño naciera muerto. Afortunadamente, una enfermera le dio RCP y reaccionó tras 15 minutos. El bebé sobrevivió, pero una nueva tragedia sacudió a su familia cuando el huracán Maria los obligó a mudarse a Estados Unidos. Allí consiguió trabajo construyendo baños, pero la nostalgia por la música le pegó, por lo que decidió integrarse a un grupo y audicionar para “La Voz US 2”.

  • Rebeca Salas, 18 años, Texas

A Rebeca Salas le gusta cantar desde que tenía 8 años y a partir de los 13 comenzó a cantar en la iglesia, cosa que hace hasta la fecha. Su madre también es apasionada del canto y soñaba con verse algún día en la televisión, desafortunadamente vivió una vida con muchas carencias en un pueblito de escasos recursos en Veracruz. Sin embargo, Rebeca quiere que su madre viva su sueño a través de ella. Su familia no está en su mejor momento, pues sus padres se separaron tras 20 años de casados y enfrentan una crisis económica. De ganar “La Voz US 2”, Rebeca quiere ayudar a su madre y en general a su familia en México, quienes viven en una situación muy precaria.

  • Marija Temo, 51 años, Wisconsin

Marija Temo se crió con música yugoslava y griega, pero a los 6 años su mamá la llevó a tomar una clase de flamenco que impartía una vecina, situación que cambió su vida, pues se enamoró del género. Tomó clases de flamenco durante 10 años. Debido a eso sus padres comenzaron a recibir en su casa a personas que les gustara el flamenco cada 4 de julio, una tradición que se mantuvo por 20 años. No sólo acudían sus vecinos, también lo hacía gente de ciudades y pueblos cercanos. Algo bastante peculiar, considerando que Ohio, donde vivían, era un lugar con poca comunidad hispana. Gracias a esas experiencias, Marija expandió sus horizontes respecto al género musical. A sus 16 años conoció a un hombre que le enseñó a cantar por fonérica. No obstante, ella no entendía lo que cantaba porque no hablaba español. Por lo que se tomó su tiempo para entender las letras y así aprendió un poco del idioma. Desde hace muchos años hace conciertos y giras tanto como solista como con un cuarteto de flamenco y además le da clases a un grupo de 30 personas. Es tan buena maestra, que Bruce Catalano, quien fuera su maestro de guitarra, es ahora su alumno.

  • Alonso García, 35 años, Illinois

Alonso García es fanático del jazz, el blues y la música clásica, géneros con los que estuvo familiarizado desde pequeño en Chicago. Su inclinación musical fue heredada por su madre. A los 13 años formó un cuarteto en el que él fungió como tenor, pero fue hasta los 16 años cuando cantó por primera vez frente a un público. En la actualidad es el vocalista de la banda 1320, que fusiona bluez, jazz y rock, música clásica y elementos de música tradicional mexicana, tienen temas tanto en inglés como en español. A pesar de que Chicago es una ciudad con mucha cultura, decidió viajar a México para conectarse con sus raíces y vivir una vida bohemia. Antes de fundar su banda, tocó en muchos bares y restaurantes mexicanos. Fue en uno de esos lugares en los que trabajaba donde conoció a quien se convertiría en su esposa, con quien tiene dos hijos.

  • Caleb Méndez, 26 años, Virginia

Caleb Méndez proviene de una familia de cantantes. Tanto sus hermanos como sus padres canta, pero no como él. Durante su adolescencia vivía en La Paz, Bolivia con su padre, quien era muy estricto, por lo que se fue a vivir con su madre a Santa Cruz. Ahí es donde comenzó una relación más estrecha con la música, ya que se reunía con sus primos para tocar con ellos. Fue en esos años cuando también comenzó a escribir música. Cinco años atrás su padre le dijo que se mudaría a los Estados Unidos y él no dudó en abandonar Bolivia y acompañarlo. El inicio de esta nueva vida fue complicado, su primer trabajo fue en un McDonald’s, después fue guardia de seguridad, mesero y también laboró en una oficina de clasificación de correspondencia. Actualmente trabaja como cajero en un banco. Sin embargo, estos trabajos le han permitido poder seguir su sueño musical y ya cuenta con cinco canciones en Spotify. Además comenzó a juntarse con personas que compartían sus gustos y metas. De igual forma conoció a su esposa y su suegro se convirtió en una figura muy importante en su vida. Gracias a sus consejos, ahorró para construir su propio estudio. Lamentablemente, el señor falleció a causa de una enfermedad fulminante y eso dejó en shock a Caleb, quien se concentró al doble y aclaró sus ideas y proyectos.

  • Kayson Luis Burgos, 27 años, New Jersey

Kayson Luis Burgos proviene de una familia en la que nunca podían faltar dos cosas: música y comida. Es por ello que tuvo la inquietud de comenzar a cantar y lo hizo por primera vez mientras cursaba el segundo grado. Kayson escuchaba la música de forma distinta a sus amigos, pues ponía más atención a la batería, los riffs de guitarra y las voces de apoyo que a la letra y al cantante principal. Durante sus años en la secundaria participó en la secundaria, además comenzó a actuar en el teatro comunitario, particularmente en obras musicales, de las que se enamoró. Ahí aprendió la disciplina de memorizar líneas, trabajar con otros y estar preparado para cualquier cosa. A los 5 años perdió a su padre, pues falleció de cáncer de estomago. Aunque no habla mucho de eso, la ausencia de su padre en su vida es enorme y los únicos recuerdos que tiene de él son las anécdotas que le cuenta su tía. Diez años después de su muerte, Kayson visitó el cementerio donde se encuentra y le cantó a su tumba.

  • Jorge Franco, 20 años, Florida

Jorge Franco se presentó a las audiciones a ciegas de la primera temporada de “La Voz US”, pero no logró que ninguna silla girara. Es por ello que regresó para demostrarle a todos que con la perseverancia puedes lograr todo en la vida. Su padre era músico de profesión y tocaba en una banda de rock en Venezuela. Sin embargo, las malas compañías y las adicciones le impidieron trascender en el mundo de la música. Afortunadamente, su padre lleva 11 años limpio y se convirtió en una guía para que Jorge no cometa sus mismos errores. Gracias a él, logró emigrar a los Estados Unidos y ahora imparte clases de karate para niños de escasos recursos a través de Abriendo las Puertas Inc., una escuela que brinda diferentes programas para niños y familias necesitadas.

  • Michelle Raymon

Muy pronto esta noticia será actualizada con más información de este participante.

Team Wisin

  • Christine Marcelle, 31 años, Florida

Christine Marcelle es madre de dos niñas, Mia de dos años, quien fue diagnosticada con autismo, y Zoe de un año. Empezó su camino en la música en su natal República Dominicana, durante un campamento de verano. A los 16 años ya era directora del grupo juvenil de coro en la banda de la iglesia cristiana y a los 19 se mudó a Estados Unidos, para trabajar en cruzadas evangélicas y cantando por distintas ciudades del país. Fue diagnosticada con co-dependencia emocional y a través de terapias tomó conciencia de su problema. Un accidente automovilístico cambió su vida e hizo que regresara a República Dominicana, donde se casó y tuvo a sus dos niñas. En ese periodo algo cambió en ella y dejó la música. Posteriormente volvió a los Estados Unidos para criar a sus hijas y su amor por la música volvió, por lo que retomó el canto. Christine asegura que todo lo que ha vivido ha sido un simple entrenamiento para poder conectar fácilmente con su hija mayor y entender su mundo. Ella asegura que recibió un “llamado” que le dijo “naciste para cantar, nunca dejes de cantar” y por ello decidió inscribirse a “La Voz”.

  • Janine Rivera, 22 años, California

La madre de Janine Rivera fue quien le inculcó el amor por la música regional mexicana. Sin embargo, al principio a sus padres no les agradaba la idea de que saliera de gira y cantara en lugares públicos, pero al ver su pasión la apoyaron para que persiguiera su sueño. Particularmente su madre, quien vendió algunas de sus cosas para poder inscribirla en concursos y clases de música. Tiene predilección por las canciones tristes y dice que el amor es algo bonito y hay canciones muy hermosas que hablan sobre éste, cree que el dolor impacta más y cuando el dolor se siente, se siente más el amor. Toca en una banda de regional mexicano, al mismo tiempo que estudia para ser abogada de entretenimiento, además de componer canciones. Hace dos años vivió una situación en el ambiente musical musical que la desilusionó y dejó de cantar. Además hace unos meses sus papás empezaron a tener problemas, por lo que se fue de su casa y para superar todo decidió audicionar en “La Voz US”.

  • Karelia Letsos, 26 años, Canadá

Karelia Letsos es de origen cubano y desde que vivía en la isla, la música era parte fundamental de su hogar. Su madre es la cantante Xiomara Mendes y su padre es un productor de televisión. Ella se inspiró precisamente en su madre para cantar y además estudió contrabajo. Sus padres le ayudaron a perder el miedo al escenario. A los 17 años comenzó a cantar y bailar para Tropicana, en donde conoció a una pareja de señores con quienes entabló amistad. La señora le mostró una foto de su hijo y aunque se le hizo guapo, no sabía si ella le gustaría. La pareja era canadiense y regresó a su país, mientras que Karelia consiguió un trabajo que la llevó a vivir a Vietnam, pero comenzó a cartearse con el hijo de la pareja, quien finalmente se convertiría en su esposo. Ambos viven en Canadá actualmente y ella trabaja en el restaurante de sus suegros, lamentablemente eso le impide cantar y eso la tiene muy triste desde hace tres años.

  • Geissie Torres, 31 años, Florida

Geissie Torres nació y creció en Cuba, en el seno de una familia de médicos. Ella rompió la tradición al elegir la música como profesión, por ello se considera la oveja negra de la familia. Sin embargo, todo es a manera de broma, pues sus padres la apoyaron en todo momento, al punto de que renunciaron a su trabajo como médicos y emprendieron una nueva aventura en Estados Unidos para verla triunfar. Ya en su nuevo hogar tuvo la oportunidad de tomar clases de canto y actuación, mismas que aprovechó y le permitió bailar y cantar para ganarse la vida. Actualmente trabaja en un club en el que imita a la cantante Selena. Su vida cambió recientemente, después de que su padre sufriera un infarto, aunque afortunadamente sobrevivió, no puede trabajar y ella se ha convertido en el soporte de su hogar, por lo que ganar “La Voz US 2” le permitirá ayudar mucho a su familia.

  • Kendra Siebens, 22 años, Florida

Kendra Siebens comenzó a cantar y a tocar la guitarra a los 12 años. Es la única interesada en la música en toda su familia. De joven estuvo en un coro juvenil, pero ella quería dedicarse a cantar pop. No obstante, su familia no podía pagarle clases, por lo que tuvo que aprender por medio de tutoriales en YouTube, pero le ayudó que tuviera muy buen oído. Al graduarse de la secundaria, comenzó a trabajar con un productor para crear su propia música. Cuando su hermana menor tenía 12 años, su madre se divorció del padre de la pequeña, lo que la puso muy triste y eso desanimó a Kendra. En esa época sintió que debía cuidarla y dejó la música para enfocarse en eso y en el fútbol. Después de un tiempo regresó a la música y compuso varias canciones sobre esos acontecimientos que vivió.

  • Carlos Salazar, 31 años, Florida

Carlos Salazar tuvo una infancia muy linda, la cual recuerda con mucho cariño y en la que estuvo rodeado de amor, música clásica, inculcada por su abuelita, y el sonido del piano de su madrina. Comenzó a cantar a los 5 años y a los 10 ya sabía tocar guitarra y piano. A sus 13 años formó un grupo llamado “4to Norte” con un grupo de amigos, que lo llevó a presentarse en varias ciudades de su natal Venezuela. A los 17 migró a los Estados Unidos con su familia y tuvo que trabajar para sobrevivir y pagar sus estudios de arte en la Miami International University of Art & Design, donde obtuvo el título de Digital Film Production. Actualmente se desempeña como productor musical y tiene un estudio casero en el que ayuda a artistas emergentes a grabar sus discos y videos musicales. Su mayor influencia es el cantante español David Bisbal, principalmente porque lo seguía en “Operación Triunfo”, reality show con el que saltó a la fama.

  • Albin St. Rose, 33 años, D.C.

Albin St. Rose está de regreso en “La Voz US” para cumplir la promesa que hizo a los coaches en la primera temporada y ver cumplido su sueño. Se trata de un músico autodidacta, compositor y cantante, quien además de ganar esta competencia quiere recibir un Grammy. Es originario de Camagüey, Cuba y su principal referente musical fue su padre, quien aunque era médico de profesión, pasaba su tiempo libre tocando guitarra y cantando boleros. A los 11 años Albin cambió toda su ropa y zapatos por una vieja guitarra y comenzó a practicar para demostrarle a su padre que sí podía tocar. A los 21 años dejó su hogar en camino a La Habana, a donde fue para tener más oportunidades en la música. Se ganaba la vida tocando en el malecón para los turistas. Ahí conoció el amor y eso le permitió salir de Cuba. Actualmente canta en restaurantes de y bares de la ciudad de Washington, además de dedicar buena parte de su tiempo a la grabación de su segundo álbum, Diverso.

  • Gabriel Alejandro Arredondo, 21 años, Puerto Rico

Gabriel Alejandro Arredondo comenzó a cantar a los 6 años, cuando le regalaron un juguete de una guitarra y un micrófono. Su padre cantaba cuando era joven, pero tuvo que dejarlo para mantener a su familia, pero por ello Gabriel lo traía en la sangre. Tiene una agrupación en su universidad, en la que está becado. Es otro de los participantes que tuvo experiencia en “La Voz Kids” y en esta nueva oportunidad viene a demostrar todo lo que tiene. Su abuelo lo obligaba a ensayar, aunque él quisiera jugar a la pelota.

  • Diana Sofia Chiriboga, 25 años, Florida

Diana Sofia Chiriboga ve en la música su misión de vida. Ella tiene la necesidad de transmitir y expresarse a través de su arte y quiera aportar cosas positivas, que sumen a la vida de otros seres humanos. Se considera un canal y un instrumento para ayudar a los demás. Por ello, colabora con la organización sin fines de lucro, Sonrisas del Cielo, que comenzó su padre a raíz del fallecimiento de su hermanito de 2 años. Su objetivo es representar un soporte para los niños que padecen de enfermedades crónicas o terminales, a través de la alegría y la diversión como ingredientes básicos para su sanación. Escribe desde los 7 años y fue a esa misma edad en la que ingresó al conservatorio de piano, lo que ayudó a su desarrollo auditivo. En algunos veranos sus padres la enviaban a Miami para recibir cursos intensivos de música de parte de productores y finalmente se mudó a esa ciudad cuando tenía 19 años, para ingresar al Miami Dade College, donde obtuvo un minor en música. Ha tenido la oportunidad de que su música se escuche en la radio de su natal Ecuador, particularmente sus dos sencillos “Voy a encenderte” y “Dame tu mano”.

  • Karen Galera, 20 años, Texas

Karen Galera es originaria de Guadalajara, México, pero prácticamente toda su vida ha residido en los Estados Unidos, pues su familia se mudó a Dallas cuando ella tenía 4 años de edad. Desde pequeña estuvo en contacto con la música, pues formaba parte del coro de la iglesia a la que acudía su familia. No obstante, su principal inspiración para dedicarse a esta disciplina de forma más concreta fue su hermano, quien se dedicaba a la producción de música experimental en su casa. Desde entonces él es su soporte y la anima para no dejar de perseguir. Sin embargo, hubo un momento en que tuvieron que separarse, ya que su hermano se incorporó al ejército y fue enviado como guardia de seguridad a la embajada estadounidense en Rusia. Además, ese momento coincidió con el proceso de divorcio de sus padres, por lo que Karen la pasó muy mal. Afortunadamente para ella, el mejor amigo de su hermano y su esposa tomaron su lugar y la acompañaron a todas sus presentaciones, mientras volvía de su servicio en Rusia.

  • Ericson González, 19 años, Puerto Rico

Ericson González se presentó a los 11 años a los castings de “La Voz Kids”, pero no estaba preparado aún para ello y no se quedó. Sin embargo, no se rindió y continuó con la música. A los 13 años tuvo la oportunidad de abrir un show de stand up y se enamoró del escenario. Se prometió a si mismo que no pediría ayuda económica a su madre, por lo que a los 14 años dejó su hogar en busca de sus sueños. Se fue a Culebra y comenzó a trabajar en un restaurante y dormía en una habitación sin ventanas, aire ni baño. En ese momento conoció a quien hoy es su pareja. Además, aprendió peinado y maquillaje, hasta que un día decidió usar su cuerpo y creó su arte transformista. Esto lo realiza en eventos especiales y es un homenaje suyo a la mujer y al poder femenino. Hoy vive de sus presentaciones musicales, así como de trabajos como maquillista y peinador. Además, compone sus propias canciones.

  • Andrea Sofia Serrano, 20 años, Georgia

Andrea Serrano comenzó a cantar un día que su madre le hizo un traje de baile y ella se puso a interpretar uno de los éxitos de Britney Spears. La música siempre fue su objetivo y de niña quería convertirse en pastora de música en la iglesia, pero se desvió un poco del camino cuando ingresó al séptimo grado y entró en una etapa de rebeldía. Sin embargo, esto cambió cuando asistió al bautismo de su mejor amiga y le dio tanta alegría que decidió volver a acercarse a la iglesia. Una de sus mayores experiencias de vida fue un viaje a Haití de siete días como misionera. Posteriormente enfrentaría el reto más grande de su vida, pues tras sufrir dolores de cabeza por varios días, los doctores descubrieron un tumor en su cabeza. La incertidumbre de saber si era maligno o benigno le hizo pasar a ella y a su familia momentos muy complicados, pero afortunadamente fue benigno y aunque tendrá que vivir con él toda su vida, toma medicamentos para controlar los malestares.