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Una familia residente de la ciudad de Fort Lauderdale en el estado de la Florida, esta devastada tras la pérdida de su querida mascota, luego de que un coyote que asediaba su casa se lo llevó para nunca más volverlo a ver.
De acuerdo con WSVN, el pasado martes 23 de julio de 2024, el pequeño “Big Boy” un chihuahua de 10 años de edad, considerado por James Thomas como el bebé de su hogar, fue presa fácil del animal silvestre frente a sus ojos cuando según él la mascota estaba en la acera de la Avenida Alabama, frente a su casa de Melrose Park, haciendo sus necesidades.
“De repente, un coyote corrió, lo agarró y se fue”, dijo Thomas. “Realmente duele”, dijo. “Es como perder a un niño. Ese es mi bebé.”
Según NBC Miami, Thomas señaló que intentó perseguir al coyote pero que el escurridizo animal cruzó la calle y se internó entre la maleza para allí hacerlo su alimento del día.
“Intenté perseguirlo y conduje tratando de encontrarlo, pero ya era demasiado tarde. No me molestaría tanto si pudiera haber recuperado su cuerpo y haberlo enterrado. Pero se lo llevó a algún lugar y se lo comió”, aseguró el dueño de “Big Boy”.
Thomas dijo que no solo Big Boy fue su perdida, pues también sus gatitos han ido desapareciendo desde que los coyotes están visitando el vecindario.
“Casi todas las semanas, cada dos semanas, falta uno. Pensé que los vecinos se estaban deshaciendo de ellos, pero fueron los coyotes”, afirmó, asegurando que los gatos que le quedan tienen tanto miedo que ahora se esconden en el patio trasero o en el techo de su casa.
Por su parte, vecinos de James Thomas también han manifestado su miedo frente al avistamiento de estos depredadores merodeando en la comunidad.
De hecho cámaras de seguridad de los timbre Ring, han tomado imágenes de coyotes en los patios de las casas por lo que muchos temen por la seguridad de sus mascotas y de sus niños.
James Thomas quiere que se haga algo antes de que alguien resulte herido. “Tenemos niños, quiero decir niños pequeños, de cuatro años, y estos coyotes, si tienen hambre, agarran cualquier cosa. Así que necesitamos hacer algo al respecto”, dijo.
La hija de Thomas, Keyunta Tyler, declaró estar muy entristecida por la muerte de su chihuahua, y previno a sus vecinos de lo ágil y audaces que son estos animales para cazar su presa, y más cuando han perdido el miedo a los humanos.
Tyler clamó porque las autoridades tomen las medidas de seguridad y de precaución para que estos animales ya no puedan llegar a las ares urbanas, según Hoodline.
Informó Miami Diario, que este incidente puso sobre la mesa la necesidad de una mayor vigilancia y control sobre la fauna salvaje que invade áreas residenciales.
El medio de comunicación dice que por su parte, las autoridades de Fort Lauderdale están investigando la situación y trabajando para abordar el problema. Aunque las medidas están en proceso, la comunidad sigue preocupada por la amenaza persistente que estos animales representan para sus hogares y seres queridos.
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